Durante el acto, el piloto de Ferrari admitió afrontar el Gran Premio de Interlagos "con confianza", aunque reconoció que necesita "una carambola" con los resultados para proclamarse vencedor del campeonato y, así, sumar su tercer Título tras los conseguidos en 2005 y 2006.

Fernando Alonso sabe que no será fácil conseguir su objetivo: "Sabemos que será difícil para nosotros, pero tenemos confianza y debemos hacer el máximo posible, concentrándonos en nosotros mismos y sin cometer errores, y luego veremos qué hace Vettel".

"Ha sido un campeonato de altibajos para todos, pero ahora nosotros sólo podemos hacer todo perfecto". Sin embargo, "creo que podemos dormir mejor que nuestros rivales: tenemos mucho que ganar y poco que perder, todo lo contrario que ellos. En 2010 la situación era la contraria, así que espero que una vez más el resultado sea en favor del que está detrás en la clasificación en este momento. No creo que la pista vaya a ser decisiva. Hemos visto que Red Bull es fuerte sobre cualquier tipo de trazado, con lo que debería ser así también en Interlagos. Pero la Fórmula 1 es rara y puede pasar cualquier cosa: lo importante es estar preparados".

Sobre la diferencia de puntos que le separan de su inmediato rival por el título, Sebastian Vettel, del que lo distancian trece puntos, el español comentó: "Ya sacaremos cuentas al final, cuando salga la bandera de cuadros. Siempre intentamos prepararnos al máximo y esta vez vamos a hacer lo mismo, cuidando todos los detalles para que no haya ningún problema y no cometer ningún error tonto", aseveró el asturiano según recoge la agencia de noticias EFE.

Alonso cerró la sesión de la Bolsa de Nueva York con motivo del anuncio del Banco de Santander, uno de sus patrocinadores, que donará 250.000 dólares a la Cruz Roja de EE.UU. para ayudar a los damnificados por el huracán "Sandy", que el pasado 29 de octubre causó graves daños en Nueva York y su región.

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"Para mí es un privilegio estar aquí en una ocasión como ésta: ¡se me ha hecho raro ser el protagonista de algo que siempre he visto por televisión!", declaró el español a los medios de comunicación. "La Fórmula 1 necesita a este país, pero aún no es muy popular, con lo que es importante que los equipos y los pilotos hagan todo lo que puedan por promocionar este deporte. ¿Correr en una serie americana como la Nascar? Nunca lo he probado, no he pensado en ello, pero quién sabe, en el futuro… Cuando acabe mi carrera en Fórmula 1, tarde o temprano, ésta podría ser una opción".

Además, el asturiano comentó en una mesa redonda organizada en la Academia de las Ciencias de Nueva York que "quedan 71 vueltas, en las que se decidirá todo. El esfuerzo de meses se concentrará en poquísimo tiempo".

"Luego lo que pase, pasará, y lo importante es que hagamos todo a la perfección: la suerte es lo único que no está bajo nuestro control", admitió el bicampeón español. "Sabemos que podría ser suficiente con subir al podio. Confío en mí mismo y en el equipo, y lucharemos hasta el final. Somos honestos con nosotros mismos y con nuestros aficionados: sabemos que no somos súper competitivos, pero si aún estamos en la pelea, es gracias al equipo, que es el mejor de todos".

"Tendremos algunas pequeñas mejoras, pero los demás también las llevarán, con lo que la situación no cambia mucho. Quizás encontrar una buena puesta a punto pueda marcar la diferencia, o la forma en que el coche se adapte al circuito", continúa Alonso.

El piloto de Ferrari no cree que, en el caso de ganar en Brasil, fuera a ser una venganza por lo de Abu Dhabi 2010. "No, creo que nos haría muy felices, y al 99% de la gente… Aunque quizás no a los de Red Bull. Ferrari es algo especial, con todo el mundo dando el 100% o más, puesto que se sienten parte de esta familia. No sólo en Fórmula 1, también en la parte industrial, porque cuando ven pasar un Ferrari por la calle saben que una parte de ese coche, por muy pequeña que sea, la han hecho ellos".