Alfa Romeo protagonizó una de las sorpresas del fin de semana en el Gran Premio de Azerbaiyán, pero no fue precisamente una sorpresa positiva. Los dos monoplazas del equipo con sede en Hinwil consiguieron meterse en la Q3, pero la sanción de 10 posiciones de Antonio Giovinazzi por usar su tercera centralita electrónica le arrastró hasta el fondo de la parrilla, por lo que Kimi Raikkonen se quedó como la única baza de la estructura en la octava posición.

Las opciones de Alfa Romeo de sumar un buen puñado de puntos en Bakú sufrieron un gran golpe cuando Kimi Raikkonen fue excluido de la clasificación la misma mañana de la carrera. El monoplaza del finés no superó las pruebas de flexión del alerón delantero, motivo por el cual se invalidaron todos sus tiempos y fue enviado al fondo de la parrilla. Al tener que romper el parque cerrado, comenzó la carrera desde el pit lane.

Raikkonen fue capaz de remontar posiciones a lo largo de la prueba en el circuito urbano de la capital azerí hasta cruzar la línea de meta en décima posición, una escalada de puestos destacable teniendo en cuenta que no salió ningún coche de seguridad físico que afectara al desarrollo de la carrera. Aun así, este punto sabe a poco en Alfa Romeo, que dejó escapar un resultado mejor debido a diferentes infracciones técnicas.

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De hecho, en Alfa Romeo eran conscientes de que podían meterse en líos con el alerón del monoplaza de Raikkonen incluso antes de viajar a Azerbaiyán. El equipo identificó un problema en el alerón delantero en China, pero no dispuso del tiempo suficiente para producir una nueva unidad para la siguiente carrera. Por este motivo, Alfa Romeo viajó con este alerón a Bakú y finalmente la FIA descubrió la incidencia.

Esta exclusión de Raikkonen puede considerarse un aviso de la FIA a los equipos de la parrilla de Fórmula 1, pues el órgano de gobierno no ha dejado pasar ni una durante las verificaciones técnicas desde el fallecimiento de Charlie Whiting. Las estructuras suelen coquetear con el límite para ganar unas milésimas extras de rendimiento, pero estas decisiones harán que se lo piensen dos veces antes de arriesgarse.