Los conocidos como ADAS, por sus siglas en ingles, –Advances Drivers Assistance Systems– son los sistemas de ayuda a la conducción cada vez más habituales en los automóviles. Son un tema de actualidad y parte fundamental del equipamiento.
Los sistemas de ayuda a la conducción están formados por sensores conectados por un software además de los sistemas actuales que llevan los vehículos. Son los que hacen referencia al mantenimiento en el carril, funciones de frenado o conducción semi autónoma y por ejemplo en estos casos se desactivarán o dejarán de funcionar si la lectura de la suspensión, frenos o dirección no funcionan según lo previsto tal y como señalan desde Iberisa, el blog del taller mecánico, que nos da las 5 claves de estos dispositivos.
1.- ¿Puede causar un limpiaparabrisas defectuoso la desactivación del sistema ADAS? Sí. Para que los sistemas de salida del carril funcionen correctamente sus respectivas cámaras necesitan tener una visión clara a través del parabrisas. Por este motivo, casi todos los vehículos que están equipados con estos dispositivos disponen de un limpiaparabrisas automático con sensor de lluvia que si detecta demasiada lluvia o si está funcionando a una velocidad muy alta, las ayudas de salida de carril o el control de crucero se apagarán.
Esto también puede pasar cuando los limpiaparabrisas están desgastados y no limpien correctamente. El conductor recibirá entonces un aviso de que la cámara no puede realizar su función correctamente.
2.- ¿Es necesario la calibración de los sistemas de ayuda a la conducción cada vez que se desconecte la batería? Puede que sí. Cuando un vehículo pierde potencia durante un periodo prolongado, puede perder las calibraciones, si bien esto dependerá del modelo y el fabricante. Esto no es algo nuevo para los talleres mecánicos que ya se enfrentan a problemas similares con los sensores del ángulo de dirección.
3.- ¿Es necesario calibrar la cámara o el sistema radar cada vez que se alinee el vehículo o se reemplace un componente? No. La calibración de la cámara o sistema radar solo es necesaria si se cambia la posición de la cámara o del módulo radar. Esto puede incluir reemplazos del parabrisas, daños en parte frontal o reemplazo de algún módulo. Por ejemplo, en los modelos Mercedes-Benz, la alineación se puede realizar sin recalibración del sistema de control de crucero adaptativo DISTRONIC.
Lo que sí es obligatorio en casi todos los vehículos es la calibración del sensor del ángulo de dirección (SAS). Además, en algunos vehículos se necesitará una herramienta de diagnosis y una prueba de conducción.
4.- ¿Qué precauciones especiales hay que tener para cambiar las pastillas de freno? El reemplazo de las pastillas de freno es una de las reparaciones más frecuente en los talleres mecánicos, aunque para realizar esta operación correctamente hay que estar al tanto de algunos cambios. En muchos vehículos con sistema de frenado de emergencia, el ABS carga un acumulador cuando el vehículo está encendido o la llaves cerca del vehículo. Esta presión permite que el sistema de frenado actúe casi de forma instantánea cuando detecta una situación de emergencia.
Hay que tener en cuenta que cuando el vehículo está parado durante un largo intervalo de tiempo el acumulador se libera y si esto pasa durante un servicio de reparación de frenos, podría haber una incidencia.
Según recomiendan desde Iberisa, para hacerlo con seguridad, hay que descargar el citado acumulador incluso mover las llaves del vehículo a una distancia razonable. Asimismo, si no se está familiarizado con el vehículo, antes de ponerse a trabajar con algún sistema es mejor mirar la información de servicio del fabricante.
5.- ¿Puede un taller independiente reemplazar los componentes de la dirección y suspensión en vehículos con ADAS? Sí, porque incluso los vehículos equipados con sistemas de ayuda a la conducción al frenar y maniobrar para evitar accidentes siguen recibiendo golpes de los baches y carreteras en mal estado. Es decir estos vehículos siguen teniendo componentes más o menos convencionales en su suspensión, como son brazos, rótulas, casquillos,…
Si se reemplaza un componente de la suspensión y cambia la punta, la curvatura o la inclinación, habrá que realizar una alineación del vehículo. Asimismo, para los vehículos con sistemas ADAS, es fundamental que el ángulo de la dirección se restablezca después de la reparación. También hay que recorar que muchos vehículos equipados con estos dispositivos utilizan la dirección asistida eléctrica para dirigir el vehículo de manera autónoma.
En este apartado, aunque la dirección asistida eléctrica no es nada nuevo para la mayoría de los talleres mecánicos, los sistemas más modernos pueden tener su propio módulo que podría montarse en el bastidor. Si este es el caso, el reemplazo de la cremallera de la dirección podría requerir una reprogramación y calibración adicionales para completar la reparación.
Como conclusion hay que tener en cuenta que los sistemas ADAS necesitan que los componentes que influyen en la visibilidad, electricidad / carga, frenos, suspensión y dirección de un vehículo estén en buenas condiciones para hacer funcionar todas las ayudas correctamente.
