Lo estábamos esperando. Desde que el gigantesco SUV de Rolls-Royce llegó al mercado en la primavera del año pasado, sabíamos que había nacido el modelo perfecto para los especialistas de Mansory. Sin embargo, el trabajo de éstos sobre el mismo se ha hecho esperar y hoy hemos sabido el motivo: han contado con la colaboración de Billionaire para asegurarse de llevar a cabo lo que no hemos dudado en bautizar como el coche más ostentoso del mundo.
Este monstruo de la carretera, que roza los 5,35 metros de largo y supera las 2,7 toneladas de peso, ha recibido un completo kit aerodinámico con piezas tan grandes y costosas como un capó de fibra de carbono, mismo material presente en los dos alerones posteriores. Además, el frontal ha recibido un parachoques, unas entradas de aire y unos faldones específicos, los mismos que tienen continuidad en la línea lateral del coche y que terminan en el difusor de aire de una zaga bien embarcada por una cuádruple salida de escape cromada.
Cuatro llantas forjadas de 24 pulgadas que calzan neumáticos 295/30 R24 en ambos ejes, completan el conjunto estético exterior de este modelo, realizado en una exclusiva pintura bi-tono que combina los colores negro mate y gris plata y contribuyen decisivamente a otorgarle ese aspecto más bajo, musculoso y alargado al Rolls-Royce Cullinan Mansory Billonarie, comparado con el modelo de serie.
Un vistazo al interior basta para quedar absolutamente alucinado porque los especialistas han forrado en piel de cocodrilo tanto los cinco asientos del Cullinan, así como la parte frontal del salpicadero, incluyendo una tapa retráctil para la pantalla central. Los paneles de las puertas también están realizados en este material y contrastan con las zonas acabadas en negro brillo. El detalle final lo pone el irremplazable techo estrellado, compuesto por numerosos led que modifican su intensidad lumínica.
Pero como no todo iba a ser refinamiento tratando de Mansory, quizá lo mejor de todo en este Cullinam tan especial es que bajo el capó se encuentra un V12 biturbo de 610 caballos de potencia y 950 Nm de par máximo, es decir, un motor con 39 CV y 100 Nm de fuerza extra. La clave es su sistema de escape específico, que garantiza también un sonido más contundente y por supuesto, una nueva centralita electrónica.
Si te lo estabas preguntando, los chicos de Mansory sí que le han puesto precio a semejante bestia del asfalto y es tan elevado como pensabas. 785.000 euros –impuestos aparte– para un modelo cuya producción se limitará a 13 unidades.
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