Uno de los principales temas de conversación para la gran mayoría de madrileños que contemplaban con detenimiento el resultado de las pasadas elecciones municipales era el devenir de Madrid Central, una de las medidas más importantes llevadas a cabo por Manuela Carmena. Dado que no todos los políticos tenían las mismas opiniones al respecto, su continuidad estaba más en el aire que nunca.
Tras las votaciones ejercidas por los madrileños, todo hace indicar que el próximo alcalde de la capital de España será José Luis Martínez-Almeida – del Partido Popular –, una persona que tenía como bandera abordar el tema de Madrid Central si llegaba a la alcaldía y parece que así será. Por el momento no sabemos con certeza que ocurrirá en los próximos días pero todo hace indicar que nos tendremos que despedir de la polémica medida de Carmena, o al menos de cómo se estaba llevando a cabo hasta ahora, pues la idea de Almeida para por “revertir” el área de tráfico restringido del centro de la ciudad.
Tras las declaraciones realizadas en la cadena SER, el político abogó por volver al sistema de Áreas de Prioridad Residencial llevado a cabo por los anteriores gobiernos del PP, al mismo tiempo que apuesta por eliminar el control de visitas en vehículos de 20 personas al mes, así como abrir el centro de la ciudad a los vehículos privados y habilitar los aparcamientos de este área a cualquier automóvil. Todo ello forma parte de un plan por “mejorar Madrid Central aportando soluciones alternativas y complementarias de movilidad a todos los sectores de la población y “valorar ajustes a las limitaciones al tráfico en la Gran Vía”.
Una de las justificaciones para eliminar el Madrid Central que todos conocemos actualmente pasa porque los datos que maneja el PP madrileño confirman que los índices de contaminación no han bajado, puesto que lo único que se ha logrado es “desplazar la contaminación a los bulevares que rodean la almendra de Madrid Central”. En este sentido, tal y como informan desde elEconomista, afirman que de 24 estaciones medidoras de la contaminación, en 22 ha subido hasta unos niveles similares a los obtenidos en los últimos ocho años. Además, Almeida explica que la normativa europea que obliga al control de emisiones en las grandes ciudades se centra en las propias urbes en general, no en la zona central de estas.
Veremos que sucede en las próximas semanas con las negociaciones definidas entre los distintos partidos políticos y con un Madrid Central que parece despedirse tal y como lo conocemos ahora. Estaremos atentos a futuras novedades, tanto de este tema como del posible adiós de los semáforos de la A5.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
