Los parquímetros de la llamada Zona de Bajas Emisiones son, a partir de hoy, un 9,89 % más caros para tratar de que los ciudadanos renuncien a su coche y utilicen el transporte público en sus desplazamientos al área más contaminada de la ciudad.
Además de esta subida en el centro, que hará que en las plazas azules el máximo pase de 2,80 a 2,95 euros y en las verdes de 2,10 a 2,20 euros, en toda la zona de estacionamiento regulado -casi toda la almendra central más los cascos históricos de Fuencarral, Hortaleza y Carabanchel- se prolonga una hora más la obligatoriedad de pagar, de 20 a 21 horas los días laborables.
Esta ampliación no afectará, sin embargo, a los residentes con tarjeta de estacionamiento, que en esa hora de más podrán aparcar gratis en su barrio no sólo en las plazas verdes sino también en las azules sin que su cuota anual, de 24,60 euros, sufra variación alguna.
También se incrementan una media de un 5 % las tarifas de la denominada Área Diferenciada Espectáculos Públicos-Zona Plaza de las Ventas, donde, los días de espectáculo, taurino o de otro tipo, se podrá seguir obteniendo un tíquet de cuatro horas para las plazas azules, pero de 17 a 21 horas en lugar de 16 a 20 horas como en la actualidad. El resto de tarifas del SER, incluidas las de las Áreas Diferenciadas "Vehículos Comerciales e Industriales", de "Talleres de Reparación" y de "Ámbito Sanitario", se mantienen inalterables igual que los distintivos de residentes.
La normativa municipal que introduce estas novedades en el Servicio de Estacionamiento Regulado (SER) entró en vigor ayer domingo pero no es efectiva hasta hoy ya que los días festivos no se aplica. La otra medida introducida en esta modificación, la obligación de parar el motor cuando el vehículo esté estacionado, incluso aunque el conductor permanezca en su interior, sí se debe cumplir desde ayer si no se quiere pagar una sanción de 100 euros.
Todas estas medidas están incluidas en el Plan de Calidad del Aire 2011-2015 aprobado el pasado 26 de abril por el Gobierno municipal para acompañar la solicitud a la Comisión Europea de una prórroga para el cumplimiento de los índices de contaminación de la ciudad, que superan los máximos establecidos por Bruselas en dióxido de nitrógeno (NO2).
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