¿Hemos cambiado los españoles nuestros hábitos a la hora de repostar a causa del encarecimiento de los combustibles? Un estudio de la empresa de investigación de mercados Kantar Worldpanel indica que en el último trimestre analizado, de noviembre de 2010 a enero de 2011, el repostaje medio ha sido de 29,5 litros frente a los 31,2 del mismo periodo de 2010 y los 33 litros de 2009, lo que supone una disminución de un 5,5 % y un 10,6 % menos respectivamente.

Según el estudio, con este descenso los conductores buscan contrarrestar la subida de precios del combustible aunque detrás de este comportamiento puede haber otra explicación, y es que sencillamente muchos conductores tienen la costumbre de repostar una cantidad de dinero fija y la mantienen pese a que por el mismo dinero haya bajado la cantidad de combustible. De hecho, en los últimos meses el recibo medio de compra se ha incrementado un 10,6 %, 24 euros, al pasar de un promedio de 180 euros en carburantes por conductor a 204 euros. Juntando ambos datos parece claro que de media paramos ahora más veces en la gasolinera.

El que puede, ahorra
El informe detalla que donde más ha disminuido el volumen en cada repostaje ha sido en los trayectos urbanos, con una caída del 6 %, así como en Andalucía (9,3 %) y la zona noroeste del país (7,8 %), mientras que la reducción en la zona norte-centro apenas roza el 1%. Esto indicaría que quienes pueden prescindir del coche a diario porque sus desplazamientos habituales son cortos tienden a dejarlo en casa más a menudo.

Por edades, los conductores que más han recortado los litros que echan en cada parada en las gasolinera han sido los más jóvenes. Y por combustibles, las variedades más caras son las que se reducen de manera más brusca: un 10,2 % en el caso de la gasolina sin plomo de 98 octanos y un 7 % en el gasóleo mejorado, mientras que en la gasolina de 95 octanos el descenso es del 5,9 % y en el gasóleo normal del 5,6 %.