Las cifras son apabullantes. Durante los últimos años, en España hemos dejado de invertir en conservación y mantenimiento de las carreteras hasta acarrear un déficit de 6.600 millones de euros. Esta es la conclusión principal que extraemos del último estudio realizado por la Asociación Española de la Carretera (AEC) que ha analizado 3.000 puntos representativos de toda nuestra red vial teniendo en cuenta hasta 133 parámetros.

Esta situación, por conocida no deja de ser alarmante y es que según leemos en el informe a este paso en 2020 será necesario la reconstrucción total de "buena parte" de nuestras carreteras.

En este peligroso juego han participado tanto el Estado, que ha dejado de emplear 2.035 millones en el mantenimiento de la red principal, como las Comunidades Autonómicas, con los 4.500 millones restantes. Entre los distintas infraestructuras que requieren ahora una una inversión urgente nos encontramos con los firmes –6.217 millones–, las barreras metálicas –229 millones– y las señales, tanto verticales como horizontales, con 171 millones.

La nota impuesta por la AEC al estado de conservación de nuestras carreteras es "muy deficiente"

En palabras del presidente de la AEC, Juan Lazcano, "Si entre 2009 y 2015 se hubiera mantenido la inversión en reposición y firmes que se realizaba en 2009, se hubiera destinado alrededor de 3.000 millones de euros a esta partida. Ahora esta cantidad se ha duplicado".

Por comunidades, las dos únicas que aprueban –y por los pelos– son Extremadura y País Vasco. Las vías de todas las demás suspenden, siendo las de La Rioja, Asturias y Aragón las carreteras en peor estado. El pago por uso de determinadas carreteras vuelve a aparecer como la única fórmula de viabilidad para el futuro.

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Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.