Si estás residiendo en Irlanda y lo que realmente te interesa son los motores térmicos convencionales, propulsados por gasolina o gasóleo, en lugar de los modelos electrificados que empiezan a poblar las calles, quizás tengas que dar tu brazo a torcer dadas las intenciones que tienen desde el gobierno.
Decimos esto porque recientemente en una comparecencia pública impartida por el primer ministro del país, Leo Varadkar, en el Smock Alley Theatre de Dublín, el máximo mandatario anuncio sus planes futuros en términos de movilidad sostenible y estos pasan por la prohibición de los automóviles propulsados por combustibles fósiles. Es decir, a partir del año 2030 se prohibirá la venta de motores térmicos en Irlanda, ya sean gasolina o diésel.
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El objetivo no es otro que el de convertir al país en un líder en la lucha contra el cambio climático. Una medida drástica que se suma a la tomada por otros países como Alemania o Italia, la cual es necesaria para que Irlanda sea un país sostenible, afirma Varadkar. El líder del gobierno aseguró que una medida como esta “requiere cambios profundos en la forma en que vivimos nuestras vidas y solamente será posible con el apoyo de las comunidades y los ciudadanos.”
Cabe recordar que el país vecino, Reino Unido, tiene la intención de hacer lo propio, pero en el año 2040. Al menos esas son las intenciones de la primera ministra, Theresa May, quien anunció meses atrás sus planes de retirar de las calles este tipo de motores, quedando exentos los vehículos híbridos enchufables. Sin embargo, algunos líderes de la oposición, como el alcalde de Londres, Sadiq Khan, se muestran más tajantes y quieren acelerar el proceso al mismo año que Irlanda, es decir, 2030.
Según unas declaraciones del propio Khan, recogidas por los colegas de Autocar: “La polución del aire no es un problema aislado, se trata de una crisis de salud nacional. El aire sucio de nuestro país está acortando nuestras vidas, dañando nuestros pulmones e impactando severamente en el sistema nacional de salud.”
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
