Las famosas autopistas alemanas de velocidad libre podrían tener sus días contados si prospera la reforma que plantea el ejecutivo teutón. Acechadas por la preocupación medioambiental de nuestros días y también por quienes las consideran inseguras, las Autobahn podrían considerarse en verdadero peligro de extinción, tal y como aseguran nuestros compañeros de Car & Driver USA.

Según la información a la que hemos tenido acceso, Winfried Hermann, responsable de tráfico e infraestructuras en el estado federado de Baden-Württemberg está dispuesto a acabar con los tramos de velocidad libre de su jurisprudencia. El político del partido verde pretende limitar la velocidad a 120 km/h de forma inmediata en un tercio de los tramos sin restricciones que pasarían de suponer el 20% en lugar del 30% actual.

Por supuesto, la mejora de la calidad del aire en la región es la razón que aduce Hermann para promover esta reforma, precisamente en una región en la que marcas como Porsche y Mercedes han tenido siempre una gran influencia pues sus respectivas sedes se encuentran en este estado.

La restricción que se quiere llevar a cabo en primer término puede resultar comedida, pero cabe recordar que coincide en el tiempo con otras acometidas en el Tirol austriaco –cerca de la frontera con Alemania– donde también se han impuesto límites de 100 km/h en tramos donde la velocidad máxima era de 130 km/h alegando motivos medioambientales. Veremos qué nos depara el futuro pero está claro que algunos en Alemania se han propuesto firmemente acabar con las Autobahn de velocidad libre.

Lettermark
Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.