Quizás no lo recuerdes pero hace seis años, concretamente la semana del 3 de septiembre de 2012, tanto el precio de la gasolina como el del gasóleo registraban unos precios máximos de récord al situarse en unas cifras muy superiores a las actuales, es decir, 1,522 y 1,445 euros respectivamente.
Afortunadamente, desde aquel entonces los precios de ambos combustibles se mantienen por debajo y en la actualidad podemos cifrar esa disminución en un 20,4% en el caso de la gasolina y un 19,5% en el diésel. A decir verdad, el precio de estos derivados del petróleo sigue su tendencia a la baja, pues los dos se han vuelto a abaratar cerca de un 1% y han encadenado siete semanas de descensos, tal y como informan desde el Boletín Petrolero de la Unión Europea.
Si tenemos en cuenta los precios actuales de la gasolina y el diésel nos encontramos con las cifras más bajas desde la semana del 30 de octubre de 2017, periodo en el que el primero de ellos se vendía a 1,20 euros, mientras que en el caso del segundo nos remontamos a la semana del 16 de abril de este año, cuando se intercambiaba a 1,164 euros. Todo ello repercute directamente en nuestro bolsillo, pues con estos precios el coste de llenar un depósito medio de 55 litros es de 66 euros, gasolina, y 64, diésel.
No obstante, si tenemos en cuenta las cifras obtenidas durante la misma semana del año anterior, el precio de la gasolina ha disminuido un 2% y el del gasóleo ha hecho lo propio casi un 2,4%. Si nos centramos en este año, concretamente en lo que respecta al último mes, las caídas en el precio de ambos combustibles es del 6,5% y del 6,6%, respectivamente.
Por último, cabe recordar que los precios medios de la gasolina sin plomo de 95 octanos es de 1,37 euros por litro, UE-28, y de 1,4 €/l, zona del euro, mientras que el del gasóleo, por su parte, es de 1,3 euros.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
