Para su último proyecto del año, el especialista búlgaro Vilner ha querido emplear toda su magia y concentrarla en un modelo muy especial que atraerá todas las miradas de los más entusiastas de BMW. Para ello, el coche elegido ha sido el primer Serie 3 en llevar asociado en su nombre la famosa letra ‘M’, es decir, el BMW M3 E30.
El preparador nos quería dejar con la boca abierta y para ello ha utilizado la base de un ejemplar del año 1990, completamente restaurado, que nos presenta una pintura en un tono rojo ‘Imola II’ y un kit de carrocería procedente de una de sus ediciones especiales, la Evolution II. A excepción del paragolpes frontal, construido en fibra de carbono, todos y cada uno de los paneles son recambios originales del citado Evo, a lo que debemos añadir unas llantas de aleación BBS de 18 pulgadas.
No obstante, Vilmer ha incorporado nuevos elementos en el exterior y ahora el coche luce unas ópticas delanteras tintadas y unas traseras con un diseño personalizado. Pero sin duda, uno de los principales protagonistas de este proyecto es el exclusivo interior que le ha otorgado este especialista, exhibiendo su verdadera magia una vez abrimos las puertas del BMW M3.
El equipo con sede en Sofía decidió utilizar una interesante combinación de tartán y cuero para recubrir los asientos deportivos firmados por Sparco, así como los paneles de las puertas, la base de la palanca de cambios y algunas zonas del salpicadero. También verás la misma tela en el techo e incluso en la bandeja trasera para completar este look retro tan especial. Vilner también envolvió el volante Momo en cuero e instaló alfombrillas de metal, mientras que las plazas traseras dejan su lugar a una jaula antivuelco.
Pero espera porque hay más. Debajo del capó, el propulsor original de cuatro cilindros y 2.3 litros ha sido reemplazado por uno de mayor tamaño que viene heredado de su sustituto generacional, es decir, el M3 E36. Estamos por tanto ante un bloque de seis cilindros en línea con un desplazamiento de 3.2 litros, una potencia de 321 caballos y 350 Nm de par máximo. Junto a él, encontramos una caja de cambios manual de cinco velocidades que transmite toda la energía al tren trasero.
Por el momento, desconocemos el precio de este precioso ejemplar aunque imaginamos que no será nada barato. Esperemos que Vilmer haga muchas más unidades como esta.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
