Una de las clases más temidas por muchos alumnos cuando están realizando las prácticas correspondientes de conducción es el momento de aparcar. Cada profesor tiene distintas referencias que son utilizadas para facilitar la maniobra siendo más o menos acertadas y sencillas de llevar a cabo.

No obstante, cada persona es un mundo y quizás lo que haya aprendido en la autoescuela se quedó allí. El mejor ejemplo de ello nos acaba de llegar desde China, donde una conductora y su Volkswagen Passat nos demuestran todo lo que han aprendido durante su etapa de prácticas, especialmente, a la hora de aparcar.

El suceso tuvo lugar el pasado 11 de octubre en la ciudad de Xuancheng en la provincia de Anhui, al este del país asiático. Gracias a las cámaras de seguridad de la zona podemos apreciar la manera tan surrealista y atropellada que tiene de aparcar esta conductora, llevándose por delante todo lo que encuentra a su paso, incluyendo una pared de ladrillos.

En el vídeo vemos a tres coches estacionados en un parking al aire libre, con dos de ellos cubiertos por una lona, y un tercero que está fuera de las líneas de aparcamiento. En ese momento, el modelo alemán entra en escena realizando una maniobra inexplicable, pues acaba empujando a uno de los coches que estaba enfrente de él, rozando a los otros dos que rodeaban a este.

Pero lo más llamativo de todo llega cuando, tras varios segundos, la conductora decide engranar la marcha atrás y dirigirse a toda velocidad contra la pared de ladrillos situada en la parte derecha de la imagen, como si de un alunizaje se tratara. Como es lógico, el muro acaba cayéndose parcialmente y el Passat se ve envuelto entre los escombros.

No sabemos qué habrá pasado por la cabeza de esta mujer pero lo más sensato será alejarse de ella al máximo. Afortunadamente, todo hace indicar que únicamente sufrió heridas leves en el accidente.

youtubeView full post on Youtube

Headshot of Borja Díaz
Borja Díaz

Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta