Continuando con la celebración de su centenario, el Grupo BMW ha presentado dos nuevos prototipos de Mini y Rolls-Royce enmarcados en la serie “Vision Next 100” que se estrenó el pasado marzo con el BMW Vision Next 100, un concept car, que de manera similar a los Mini y Rolls-Royce anticipa el futuro del grupo y cómo será la movilidad en las próximas décadas.
El objetivo del BMW Group es, en este sentido, mostrar una imagen del futuro lo más global posible tomando un horizonte de dos o tres décadas. Para ello ha elaborado seis tesis relacionadas con la movilidad individual durante los próximos años basándose en tendencias actuales y previsiones para el futuro.
La primera tesis dice que las nuevas formas de movilidad ofrecerán a las personas gran cantidad de posibilidades de llegar al destino que desean. BMW desea contribuir de forma decisiva a diseñar las formas de movilidad futuras. La conectividad a la red tendrá mucho que ver con ello, erigiéndose como la segunda tesis, ya que en el futuro todo estará conectado. El grupo bávaro está convencido de que la digitalización y la inteligencia digital deben servir a las personas.
BMW antincipa que la movilidad será cada vez más flexible y se adaptará cada vez mejor a los deseos de cada persona. En el futuro, la movilidad estará tan personalizada que las personas llegarán a su destino automáticamente con el mejor medio de transporte y por su ruta preferida.
Las tecnologías son cada vez más inteligentes. En el Grupo BMW piensan que las innovaciones solo sirven a las personas si su manejo es sencillo, por esa razón las tecnologías deben aprender a aprender de las personas y adaptarse a ellas. El fin es que la técnica no parezca técnica, sino que sea humana y cercana para todos.
Por último, el personal de BMW piensa que la energía estará libre de emisiones y que en el futuro provendrá cada vez más de fuentes renovables. El objetivo es la fabricación vehículos ecológicos con la ayuda de energías renovables que se reciclarán sin emisiones.
Los dos nuevos prototipos cumplen con todas las tesis planteadas y ofrecen una forma de movilidad urbana disponible siempre y en todo lugar en el caso del Mini; y una mirada al mundo del futuro del lujo automovilístico hecho a medida si hablamos del Rolls-Royce.
Ambos conceptos se basan en la propulsión limpia y la conducción autónoma. En su construcción incorporan nuevos materiales sostenibles, que por otra parte permitirán un nivel mayor de personalización. La interacción entre vehículo y ocupantes será máxima en ambos modelos, priorizando la comodidad y el lujo en el Rolls y la diversión en el Mini.
El Mini propone también explotar el concepto de coche compartido y ayudándose de su conducción autónoma pretende compartirse y adaptarse a las necesidades de los usuarios, pudiendo solicitarlo en cualquier momento sin importar la hora o la ubicación. Cuando el Vision Next 100 no esté en uso, se desplazará sin ocupantes a una estación de recarga o hasta el siguiente usuario que lo haya solicitado.
