Las cifras del Mercedes SLS AMG asustan: un motor V8, una cilindrada de 6.2 litros, 571 caballos, caja de cambios automática de siete velocidades, una velocidad máxima de 317 kilómetros/hora y un 0 a 100 kilómetros/hora en apenas 3,8 segundos, cifras que para un coche de 1.700 kilogramos y 200.000 euros, son las necesarias para que se convierta en un coche de asistencia. O eso han debido pensar en Mercedes.

En la feria RettMobil de seguridad que se celebra estos días en Alemania se ha presentado este concept basado en el SLS AMG y cuya finalidad es la de servir de coche de lanzadera para acudir el primero a un accidente o un suceso y señalizar el problema, para que los servicios sanitarios y los de seguridad puedan actuar más rápidamente.

Así, el SLS AMG 'respuesta rápida' cuenta con luces de emergencia específicas, un equipo de comunicaciones compuesto por un GPS y un localizador, radios (para estar conectado para a la de las fuerzas de seguridad como a las médicas) así como un sistema de apertura de puertas bastante curioso por el SLS AMG se accidente: unas cargas pirotécnicas vuelan literalmente las mismas para facilitar la salida al conductor y al copiloto. No hay que olvidarse que en la decoración exterior, juega un papel muy importante la pintura Alubeam (es un barniz específico, bastante caro, desarrollado por Mercedes con nanotecnología, con la que se consigue que pequeños arañazos no se aprecien).