La bestia definitiva de Lamborghini se llama Aventador Super Veloce Jota y tras filtrarse ayer su primera imagen en un perfil de Instagram de la marca italiana, ha debutado hoy en Pebble Beach, Estados Unidos, muy lejos de donde ha sido desarrollado. El desarrollo del SVJ se ha cocinado al fuego intenso del Infierno Verde de Nürburgring donde ha completado una vuelta récord en nada menos que 6:44.97 minutos; una cifra escalofriante.
El Lamborghini Aventador SVJ presenta un diseño más agresivo que los S y SV que recuerda en cierto modo al del Centenario. En el frontal advertimos un parachoques específico, con unos deflectores instalados en los laterales y nuevas entradas de aire tanto en la parrilla delantera como en el capó, situadas estas últimas a ambos lados del logotipo central. En la zona posterior, resalta el gran alerón fijo pero también dos grandes tomas de refrigeración para el motor que se elevan por delante de éste y que están cubiertas de fibra de carbono, mimo material que da forma al spoiler y a la carcasa del motor, entre otros detalles.
Tanto en las fotos espía como en la filtrada de forma oficial, se intuía que todos estos elementos forman parte del denominado sistema de Aerodinámica Activa de Lamborghini conocido como ALA por sus siglas y estrenado recientemente por el Huracán Performante, pero ahora con todas las imágenes y los datos oficiales, comprendemos que estamos ante una nueva evolución de este sistema, denominado ALA 2.0 y capacitado para lograr una mejora del downforce del 40% en ambos ejes, con un coeficiente mejorado también en un 1%. ¿Qué quiere decir esto? Pues que el Aventador SVJ es capaz de generar mucho más agarre tanto en el tren delantero como el posterior en las curvas más rápidas gracias a este paquete de aerodinámica activa mientras que cuando rueda a velocidades 'normales' en autopista, su resistencia al viento es incluso algo inferior que la de su antecesor, el SV.
El compendio técnico reúne también unos amortiguadores magnetoreológicos un 15% más rígidos, barras antivuelco especiales y mejoras sustanciales en los sistemas de cuatro ruedas directrices –LSR–, tracción total –envía un 3% más de par a las ruedas traseras– y control de tracción y estabilidad para adaptarlo al funcionamiento del ALA 2.0. Además, los Pirelli P Zero Corsa que calza este modelo han sido desarrollados específicamente para él y aunque están perfectamente homologados para su uso en carretera, opcionalmente el fabricante italiano sirve otro compuesto para circuito.
Todos estos detalles que unidos a una disminución del peso considerable que le permite frenar la báscula en los 1.525 kilos y a una ganancia de potencia igualmente por parte del motor V12 situado en posición longitudinal posterior, permite a este modelo alcanzar unas prestaciones de infarto. El propulsor genera 770 caballos de potencia y un par máximo 720 Nm a 6.750 vueltas, situándose muy cerca del Ferrari 812 Superfast y declarando una relación peso/potencia de 1,98 kilos.
El equipo multimedia también ha sido rediseñado para este modelo y mientras que el cuadro de mandos digital ofrece diferentes vistas con los modos de conducción Strada, Sport y Corsa además de servir información del sistema ALA de primera mano, la pantalla central ha recibido un nuevo software de conectividad Apple Car Play para iPhones, responde ante comandos de voz y sirve datos de telemetría al conductor.
Por otro lado, el programa de personalización de Lamborghini permitirá configurar cada una de las 900 unidades del SVJ que se producirán, de forma que sus clientes podrán decorarlos a su gusto aunque eso sí, tendrán que esperar hasta principios de 2019 para disfrutarlo. A partir de esta fecha comenzarán las entregas de los pedidos, todos ellos con un precio mínimo de 350.000 euros –impuestos aparte–.
Especialista en temas de motor y tecnología. Apasionado de la mecánica y las cuatro ruedas desde niño, ahora trato de transmitir mis experiencias a todo aquel que disfrute con el olor a gasolina, la velocidad, el placer de conducir, el diseño y el sonido de esos motores que nos ponen los pelos de punta
