El utilitario de Audi mide 3,99 metros de longitud, con una carrocería de acertadas proporciones y un sistema de propulsión híbrido de segunda generación bajo el capó.

Un motor térmico de 1.4 litros y 150 caballos se combina con otro eléctrico de 27 caballos para conseguir un consumo combinado de 3,9 litros de gasolina a los 100 kilómetros y unas emisiones de sólo 92 gramos de dióxido de carbono por kilómetro. La clave de su funcionamiento híbrido es la incorporación de baterías ión-litio, que aumentan la autonomía de una forma muy sustancial y, según Audi, permiten 100 kilómetros de desplazamiento exclusivamente con el motor eléctrico, capaz de alcanzar una velocidad de 100 kilómetros/hora.

La batería y el motor del prototipo pesan tan sólo 40 kilos, mucho menos de lo habitual en un coche híbrido actual equipado con baterías de níquel-metal-hidruro. Se recarga enchufándola a una toma de corriente cualquiera y, además, puede funcionar de forma autónoma hasta que le queda tan sólo un 20% de su capacidad, tres veces menos de lo habitual, lo que permite aprovechar al máximo los recursos de la batería.

El cambio de marchas es el S-Tronic de doble embrague y seis velocidades; esta caja puede combinar la potencia del motor térmico y el eléctrico o funcionar sólo con el segundo. La elección de la fuente propulsora está en manos del conductor y depende de los programas “Sport” y “Efficiency”, que convierten al motor eléctrico en una fuente de recurso en caso de fuerte aceleración o en el único medio de propulsión, respectivamente. Además, los programas de conducción modifican también el tarado de la amortiguación, como ocurre en otros modelos de Audi.

Las puertas sin marco para las ventanillas del A1 Sportback Concept dejan paso a un interior futurista, que seguramente no heredará la versión definitiva de este utilitario, y que incorpora un sistema multimedia que se sincroniza con el teléfono móvil del conductor, si éste dispone de agenda, navegador o reproductores de música y vídeo. La comunicación entre el coche y el teléfono se produce mediante Wi-Fi y se controla con un nuevo mando MMI, evolución de los sistemas que equipan los Audi actuales.

Este revolucionario modelo, que exhibe la tecnología futura de la marca de los cuatro aros, podría ponerse a la venta durante el próximo año 2009, aunque suponemos que con una dotación de equipamiento e incluso mecánica (sobre todo en lo referente a frenos y suspensiones) claramente inferior.

Lettermark
Jose Carlos Luque

Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.