Quienes valoran el automóvil por la libertad que ofrece, vas a alucinar con este AeroMobil 3.0, una creación digna de una película de ficción que sin embargo, es real y funciona perfectamente. Este coche volador ha sido diseñado por el eslovaco Stefan Klein y el próximo día 29 octubre realizará su primer vuelo oficial en el 'Pioneers Festival' de Viena (Austria).
En este evento, dedicado a la ciencia y la tecnología, el AeroMobil se exhibirá ante el público pero no será la primera vez que sus creadores comprueban su capacidad para volar perfectamente, el anterior desarrollo –2.5– ya logró completar varias pruebas en circuito cerrado cerrado y para este 3.0 simplemente se han acabado de pulir algunos detalles a la vez que se han mejorado sus acabados y materiales para ser más apetecible al público general.
Lo que se ha mantenido intacta es su arquitectura, con dos alas plegables que se pegan al centro de la carrocería para circular por carretera y se despliegan en la pista de cualquier aeródromo para volar. Su mecánica es mucho más sencilla de lo puedes pensar. Un motor Rotax 912 muy similar al de las motos de agua de SeaDoo o al cuadriciclo CamAm Spyder se encarga de mover este vehículo, de sólo 450 kilos de peso. Entrega 100 caballos de potencia y garantiza una autonomía de 500 kilómetros y una velocidad de 160 km/h en carretera, mientras que en el aire puede cubrir hasta 692 kilómetros a una velocidad máxima de 200 km/h.
Ahora sólo queda resolver los actuales problemas legales para que este tipo de vehículos voladores puedan 'circular' por el cielo de forma perfectamente regulada. En cuanto esta situación se arregle, no tenemos duda de que los veremos surcar las nubes.
Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.
