Se trata del alumno aventajado que introdujo los motores híbridos en el segmento de los utilitarios, pero los años no pasan en balde para nadie y el Toyota Yaris se ha visto obligado a evolucionar para mantener –y mejorar– las cifras cosechadas por su predecesor. Los cambios afectan a todo el conjunto y empiezan por un nuevo diseño que afecta, sobre todo, al frontal y a la zaga.


Parrilla, paragolpes y faros delanteros han sido redibujados para conseguir un efecto tridimensional y conferir más carácter al pequeño japonés. Las luces diurnas led dibujan una nueva mirada que se asemeja a la propuesta por el Toyota C-HR, mientras que el parachoques se inspira en las formas de un catamarán para conseguir un carácter más deportivo. En la parte trasera son nuevos el portón y los grupos ópticos, más grandes. Asimismo se han añadido dos nuevos colores a la paleta de opciones, el Azul Nébula y el Rojo Tokio, que junto a los ya disponibles conforman un catálogo de siete tonalidades.

Land vehicle, Vehicle, Car, Automotive design, Property, Neighbourhood, Architecture, City car, Subcompact car, Hatchback, pinterest

Dentro, encontramos un panel de instrumentos con nuevos diales y una pantalla TFT de 4,2 pulgadas que aporta información de todo tipo, mientras que la iluminación del cuadro pasa a tener tonos azulados y la interfaz del sistema multimedia ha sido actualizada. De la misma forma, volante y salidas de aire han sido actualizados, así como la cantidad de opciones disponible en cuanto a colores y tapicerías.


Todos estos cambios aportan dinamismo a la cabina y contribuyen al confort a bordo, sobre todo en los niveles de acabado superiores, pues el equipamiento es realmente completo, no obstante, se echa de menos el sistema Apple Car Play en el apartado de conectividad, y una pantalla central mejor posicionada que no presente problemas de visibilidad para el conductor en condiciones de mucha luminosidad. Por otra parte, se agradece la inclusión del completísimo Toyota Safety Sense en todas las versiones sin coste adicional, se trata de un paquete que incluye sistema de seguridad precolisión con frenado automático de emergencia, control inteligente de luces de carretera, avisador de cambio involuntario de carril y reconocimiento de señales de tráfico.

Land vehicle, Vehicle, Car, Vehicle door, Hatchback, Automotive design, City car, Mid-size car, Subcompact car, Bumper, pinterest


El modelo 2017 también presume de un menor nivel de ruidos y vibraciones. Los ingenieros de Toyota han modificado 900 piezas para hacer del Yaris un vehículo más sigiloso y cómodo. Componentes como los tacos del motor o el silenciador del tubo de escape han sido sustituidos para transmitir menos vibraciones y sonidos al interior. En este sentido, nuestro protagonista se convierte en el compañero de viajes ideal mostrándose muy cómodo en cualquier tipo de vía y destacando el magnífico trabajo de la suspensión, que filtra a la perfección las irregularidades del terreno gracias a su tarado blando. Al fin y al cabo, es un coche que nos invita a ir tranquilos, pero los más exigentes no tienen de qué preocuparse, ya que a principios de 2018 llegará el Yaris GRMN con 210 caballos de potencia y una puesta a punto más radical en la que los amortiguadores serán de todo menos blandos.

El Toyota Yaris GRMN estará disponible en 2018 y contará con los avances de desarrollo e ingeniería de Toyota en el World Rally Championship (WRC)

En cuanto a la oferta mecánica, el escalón de acceso sigue representado por el 1.0 VVT-I de 69 caballos, un pequeño bloque atmosférico de fiabilidad contrastada que por economía de uso se convierte en la alternativa ideal para los más urbanitas. Su funcionamiento es agradable y gracias a las estrechas relaciones de la caja de cambios manual de cinco velocidades no necesitaremos más potencia en los trayectos urbanos, sin embargo en vías rápidas echaremos de menos un extra de energía.

Motor vehicle, Automotive mirror, Steering part, Mode of transport, Automotive design, Steering wheel, Vehicle, Center console, Car, Speedometer, pinterest


La novedad llega de la mano del 1.5 VVT-IE de 111 caballos, un inédito bloque de aspiración natural que sustituye al vetusto 1.33 VVT-I prometiendo mejores consumos y mayor rendimiento. Su funcionamiento es agradable, sobre todo en la parte intermedia y alta del cuentavueltas –como buen atmosférico–, de donde no nos será difícil salir si jugamos con el cambio manual de seis velocidades. En nuestra toma de contacto realizada por los planos alrededores de Ámsterdam conseguimos una media de 6 litros, y aunque con una orografía menos llana la cifra subirá ligeramente, no se nos antoja alta, sobre todo si tenemos en cuenta que los 111 caballos de potencia son más que suficientes para mover con soltura el conjunto.


Los más ahorradores podrán decantarse por el 1.5 VVT-I Hybrid, la variante más eficiente del catálogo, revisada para la ocasión con la finalidad de ampliar el rango de funcionamiento en modo completamente eléctrico. Combinando trayectos por ciudad y carretera es fácil lograr consumos medios de unos 4 litros, y gracias al motor eléctrico dispondremos de empuje suficiente en todo momento. Aunque por coste ésta variante se coloca en el nivel superior de la gama, ya supone más del 40 por ciento de las ventas del Yaris en España, cifra que previsiblemente aumentará en los próximos meses. Su precio de acceso –descuentos incluidos– asciende a 14.850 euros y a cambio ofrece una tecnología única en el sector y un equipo bastante completo. En el lado opuesto encontramos la opción 1.0 VVT-I, que arranca en 10.350 euros; mientras que el nuevo 1.5 de 111 caballos tiene una tarifa base de 12.100 euros.

Mode of transport, Speedometer, Gauge, Tachometer, Light, Black, Measuring instrument, Fuel gauge, Trip computer, Odometer, pinterest