Una de las escasas unidades del Lamborghini Gallardo 560-4 Bicolore que existen, protagonizó la pasada semana un aparatoso accidente en el sur de Francia. Como podéis ver, el deportivo italiano acabó volcado en mitad de la vía y presenta daños importantes en su carrocería, como su mecánica.
A tenor de las imágenes, podríamos anticipar que esta serie ya es un poco más exclusiva y su propietario un poco más desafortunado pero lo cierto es que no se conoce ni su identidad y casos peores hemos visto en cuanto a reparaciones millonarias. De hecho, ni siquiera ha trascendido si eran una o dos personas las que ocupaban el vehículo y en qué estado se encontraban después del golpe. Sólo un puñado de imágenes del Lamborghini dan fe de la gravedad del accidente, envuelto en un gran secretismo.
Lo que sí anticipamos es que no ha habido víctimas mortales, pues el habitáculo es una de las zonas que mejor resistieron a los impactos y tan sólo apreciamos como el característico techo negro de esta unidad, está algo más bajo en la parte del conductor.
Recordemos que el Lamborghini Gallardo 560-4 Bicolore es una edición especial decorada en dos tonalidades tanto en su exterior como en el interior y provista de una mecánica más potente. Su propulsor V10 declara 560 caballos a 8.000 vueltas y un par máximo de 540 Nm a 6.500 y lo que permite acelerar de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos y de 0 a 200 en 11,8, alcanzando una velocidad máxima de 325 km/h. Sin duda hablamos de un potencial enorme, pero es importante saber cuando aprovecharlo y cuando no.
Experto y apasionado del motor y la comunicación en todas sus formas, recalé en Car and Driver a finales de 2007 y desde 2016 dirijo este site. Periodista de vocación y formación, conservo buenos contactos en el sector y trato de que la información que leas aquí sea la más inmediata, completa y veraz. Pero también realizo pruebas, comparativas, noticias, entrevistas... y en mis ratos 'libres' crío a tres niños pequeños que –con diferencia– es el trabajo más duro de todos los que he hecho jamás.
