Seis de los 50 tramos de carreteras más peligrosas del país están en Castilla-La Mancha, en concreto en las provincias de Cuenca y Ciudad Real. Es en ésta donde se encuentra la carretera con el tramo más peligroso del país: se trata del kilómetro 192 de la N-420, en el término municipal de Poblete, que tiene un índice de peligrosidad que supera en más de 140 veces la media nacional. Sin embargo, el tramo con más accidentes y víctimas está en la provincia de Málaga, en el kilómetro 238 de la A-7, a la altura de Arroyo de la Miel, que en los últimos cinco años ha registrado 59 accidentes y 96 víctimas.

Según el citado informe, la carretera N-420 en la provincia de Ciudad Real tiene tres puntos (los kilómetros 182, 187 y 192) entre los cincuenta más peligrosos del país. Además, la N-400 a su paso por la provincia de Cuenca tiene el kilómetro 159 incluido entre los 10 más peligrosos de España, y el kilómetro 168 situado en el puesto 11 de este estudio.

El informe ha estudiado 180 kilómetros de carreteras, autovías convencionales y autovías y autopistas de peaje localizados en 53 vías situadas en 37 provincias españolas. De los 180 tramos analizados este año, uno de cada cuatro ya aparecían como tramos de concentración de accidentes en el informe del año pasado y sólo cinco están señalizados como "puntos negros", según ha destacado la AEA.

Esta entidad se ha basado para elaborar esta clasificación en el Índice de Peligrosidad Medio obtenido por el Ministerio de Fomento en los tramos de concentración de accidentes de la red de carreteras del Estado durante el periodo 2007-2011