La primera clasificación de la temporada del Mundial de Resistencia (WEC) en Spa-Francorchamps tuvo el desenlace esperado. Toyota dominó la categoría LMP1 sin necesidad de consumir todo el tiempo de la sesión con la unidad de Kobayashi/Conway/López haciéndose con la pole con un registro de 1’54’’583, casi cuatro décimas por delante del vehículo de Alonso/Nakajima/Buemi en una sesión que se vio interrumpida en dos ocasiones por banderas rojas.
Alonso fue el primero en tomar los mandos del Toyota #8 y completó su única vuelta en un tiempo de 1’55’’143, mientras que Conway en la unidad hermana consiguió rodar en 1’54’’679. El piloto asturiano ha superado la prueba inicial en su debut en el WEC con buena nota, pero el verdadero bautismo ocurrirá en la carrera. Alonso tendrá que enfrentarse a situaciones que ya se encontró durante su participación en las 24 Horas de Daytona, con la diferencia de que podrá luchar por la victoria en esta ocasión.
La clasificación tuvo que interrumpirse en los instantes iniciales ya que el prototipo de SMP Racing pilotado por Sarrazin/Orudzhev /Isaakyan se detuvo en la pista y no pudo reemprender la marcha. Más larga fue la segunda interrupción de la sesión, causada por un fuerte accidente de Pietro Fittipaldi en el DragonSpeed de LMP1. El piloto brasileño perdió el control del vehículo en Radillon a gran velocidad, en lo que pareció ser un fallo mecánico, y golpeó las protecciones de neumáticos. Fittipaldi necesitó atención médica y tuvo que ser trasladado al hospital en ambulancia.
Los LMP1 privados no fueron capaces de plantar cara a Toyota, confirmando que lo visto en la tercera sesión de entrenamientos libres fue un espejismo. El primer vehículo del grupo fue el Rebellion de Senna/Lotterer/Jani, siendo casi dos segundos más lento que el primer Toyota. En cuarto lugar terminó el otro Rebellion, el de Menezes/Laurent/Beche, a dos segundos y medio del mejor tiempo. La quinta posición fue para el SMP de Aleshin/Petrov, por delante del ByKolles. Los Manor confirmaron su retirada de la prueba después de no rodar en ninguna sesión.
El Signatech Alpine de Lapierre/Negrao/Thiriet consiguió la pole en la categoría LMP2 con un tiempo de 2’02’’405, superando al G-Drive de Pizzitola/Vergne/Rusinov por 24 milésimas. El bólido del Jackie Chan DC Racing de Aubry/Tung/Richelmi finalizó en tercera posición, por delante de la unidad hermana de Jeffri/Tan/Jaafar. Tras las buenas sensaciones mostradas en los libres, el DragonSpeed de Maldonado/González/Berthon quedó relegado al quinto lugar de la clasificación.
En GTE Pro también se cumplieron los pronósticos. Ford firmó un doblete en la primera clasificación del año con el vehículo de Tincknell/Priaulx/Kanaan liderando la tabla de tiempos gracias a un registro de 2’12’’947, superando a la unidad de Mücke/Pla/Johnson por 83 milésimas. Los dos Porsche finalizaron por detrás de ambos Ford. El coche de Bruni/Lietz terminó en tercer lugar, quedándose a apenas cuatro milésimas del segundo puesto. El Porsche de Estre/Christensen se quedó más lejos que la unidad hermana del mejor tiempo, siendo cuatro décimas más lento que el Ford que encabezó la tabla. Ferrari, BMW y Aston Martin no estuvieron a la altura al ser incapaces de reducir la distancia de un segundo que les separa de la cabeza.
Porsche lideró en la categoría GTE Am con la unidad del equipo Dempsey-Proton pilotada por Ried/Campbell/Andlauer. El coche encabezó la clasificación con un tiempo de 2’16’’357, aunque le siguió muy de cerca el siempre presente Aston Martin de Lamy/Dalla Lana/Lauda. La diferencia entre la primera y la segunda posición fue de escasas tres milésimas de segundo. En tercera posición terminó el Porsche de Team Project 1 con Lindsey/Bergmeister/Perfetti, a menos de una décima del mejor registro.
