El polaco, que volvió a la competición oficial en el mes de septiembre con buen sabor de boca logrando sendas victorias globales en dos de los tres rallyes en los que ha participado –Ronde Gomitolo Di Lana y el Rallye Città di Bassano-, ha decidido subir el nivel y participar con el equipo campeón del WRC, Citröen, en estas dos carreras que se deben celebrar a finales de la presente temporada de rallies
"No puedo esperar para pilotar un coche tan rápido y exitoso como el C4 WRC", alegaba Robert Kubica en el comunicado oficial emitido por la marca francesa. "Los rallyes son una de mis ramas favoritas del motor. Tras completar una sesión pruebas para poder acostumbrarme al coche, competir en el Rallye di Como será, sobre todo, una oportunidad para coger el tacto al coche y aprender mucho más sobre la conducción en estas condiciones", continuaba.
De cara al segundo evento, el polaco buscará objetivos algo más ambiciosos en una prueba que conoce algo mejor y a la que llegará con más rodaje en el C4:
"El objetivo será diferente para el Rallye du Var. Esta será la tercera vez que tome parte, así que es un rallye con el que ya estoy familiarizado y donde me siento muy cómodo, pero ante todo quiero acumular tantos kilómetros como sea posible y mejorar en la categoría".
La primera prueba de fuego para Kubica será del 15 al 17 de noviembre sobre 126 kilómetros de etapas cronometradas alrededor del Lago Como. Esta será una gran piedra de toque para su siguiente cita, una semana después, en el Rallye du Var, correspondiente a la octava y última ronda del French Tarmac Rally Championship
