El T-Wing de Mercedes sigue trayendo polémica. El viernes se desprendía del monoplaza de Bottas en los segundos entrenamientos libres causando daños en el coche de Verstappen.

Tras el accidente la FIA pidió a Mercedes que arreglara el problema y debería garantizar que no volviera a haber ningún problemas por por esa pieza. “Arreglamos el problema” dijo Wolff el sábado. El T-Wing apareció en la clasificación y en los Libres 3. “Lo hemos reforzado. Ahora no sería capaz de caerse ni utilizando un bate de béisbol”, recoge en declaraciones motorsport.com.

Pero el jefe de Red Bull, Christian Horner, no estaba muy por la labor de dejar a Mercedes competir con su nueva pieza, pidiendo que fuera eliminada. Además de ello, Red Bull también puso en duda la legalidad del Ferrari SF70H, diciendo que hay varios elementos en el coche que flexan a la alta velocidad.

Wolff cansado de las acusaciones desde Red Bull dijo: “Está claro que Christian necesita hacerlo. Uno intenta eliminar parte de otros coches que funcionan. Es perfectamente comprensible, y además estropeó el suelo de su choche”.