Mark Gillan, ingeniero jefe del equipo, analizó cómo les fue el Gran Premio de Canadá y comenzó por lo que no se pudo ver del equipo inglés debido a los problemas durante las sesiones de entrenamientos libres. "Tuvimos un ritmo decente con mucha carga de combustible el viernes y Pastor fue muy rápido el sábado por la mañana con poca carga también, por lo que íbamos razonablemente confiados a la calificación", ha comentado Gillan.

"Ambos pilotos sufrieron accidentes que dañaron sus cajas de cambios y como Pastor la cambió en calificación, tuvo una penalización de cinco posiciones en carrera", se ha lamentado el ingeniero jefe de la formación.

"Los dos apretaron fuerte en su estrategia de una parada, pero no fuimos tan competitivos como lo hemos sido recientemente, por lo que hacer progresos en el paquete no es tan fácil como pensábamos. Sin embargo, pasaremos mucho tiempo diseccionando los datos del fin de semana, especialmente en los cambios de temperatura de la pista y cómo afectaba esto en el rendimiento de las gomas para actuar en consecuencia en el futuro. Las mejoras aerodinámicas de Montreal funcionaron como esperábamos y lo hicieron en ambos coches".

Sobre los problemas que tuvo Bruno Senna en las dos sesiones de libres del viernes, que condicionaron su rendimiento durante el resto del fin de semana, Gillan ha explicado que "con la primera sesión estuvo comprometida por no poder usar su DRS y en la segunda tuvo un accidente en el que dañó tres partes del coche: alerones delantero y trasero y la caja de cambios. Los mecánicos trabajaron muy duro por la tarde-noche del viernes para reconstruir el monoplaza. Teníamos los suficientes repuestos para garantizar las últimas especificaciones y que estuviese listo para la sesión de la mañana del sábado".

En el controvertido tema de las estrategias en este último Gran Premio, donde algunos equipos optaron por arriesgar a una sola parada –elección que en pocos casos fue la correcta–, al equipo Williams le funcionó, aunque no saben cuanto de más podían haber exprimido de la misma.

"Teniendo en cuenta nuestras posiciones de salida, estamos contentos con la estrategia de una parada, pero necesitamos ver cómo administramos los neumáticos durante los stints para ver si podíamos haber sido más rápidos".

Por último, Mark ha hablado de lo bien que funcionaron sus soluciones para los frenos en la prueba canadiense, algo clave para el próximo circuito –Valencia–, donde las exigencias serán similares y el reto volverá a ser el mismo en ese sentido.

"Montreal es muy duro con los frenos, pero nuestro material de frenos y las soluciones para refrigerarlos funcionaron bien, por lo que los frenos no fueron un problema durante la carrera. De forma parecida al de Montreal, el circuito de Valencia estresa bastante el sistema de frenado. También debido a las altas temperaturas, el sistema de refrigeración tendrá una prueba de fuego", ha conluido.