El Gran Premio de Alemania llega justo después de la prueba disputada en Gran Bretaña y con la intención de Sebastian Vettel de recuperarse de la avería mecánica del RB9 y volver a la parte delantera de la parrilla. El tricampeón tiene la oportunidad de hacerlo en un escenario muy especial, Nurburgring: en el circuito de su casa y delante de los aficionados locales.

Líder del Mundial de Pilotos con 132 puntos y una ventaja de 21 guarismos frente a su máximo rival, Fernando Alonso, el de Red Bull lo tiene claro a la hora de señalar a los que serán sus principales contrincantes en el 'infierno verde'. Así, en una entrevista al Circuito de Nurburgring, el alemán afirmaba: "Las personas usuales: Fernando Alonso y Lewis Hamilton, también Kimi Raikkonen y Mark Webber".

Vettel nunca ha ganado el GP de Alemania y, en los dos últimos años, no ha subido al podio en su tierra. En 2009 finalizó segundo en Nurburgring, en 2010 subió al tercer cajón en Hockenheim, en 2011 fue cuarto y el año pasado -2012- acabó la carrera en la quinta posición. Siguiendo tal peculiar estadística, este fin de semana Vettel debería acabar sexto, resultado que, por supuesto, no es su objetivo. "No presto mucha atención a los datos y estadísticas. Estaría bien fijarse en las estadísticas a veces pero solo muestran lo que ha pasado en el pasado no lo que está por llegar", aseguraba el germano.

Sin embargo y en un terreno más distendido, Vettel sí que seguirá con la estadística y tradición en lo que a la presencia de su casco se refiere. El piloto que más diseños luce en su casco a lo largo de la temporada no podía fallar ante la prueba germana y volverá a lucir, por enésima vez, una nueva apariencia. "Estoy seguro de que conseguiremos otro gran diseño para el Gran Premio de Alemania".

EL 'INFIERNO VERDE' ESPERA A VETTEL

Este fin de semana la Fórmula 1 volverá a rugir los motores en uno de los circuitos más míticos del calendario, Nurburgring. Pese a los problemas financieros que estuvieron a punto de cancelar la prueba en el 'infierno verde', los responsables y organizadores del evento junto a Bernie Ecclestone llegaron a un acuerdo para organizar el Gran Premio de Alemania. Trazado que incluye una parte del histórico Nordschleife, Vettel afirma que le gustaría pilotar por el antiguo y legendario trazado. "Por supuesto que me gustaría correr en el Nordschleife, pero desafotunadamente eso no es posible", señalaba en una entrevista con el área de comunicación de Nurburgring.

Y añadía: "Desafortunadamente nuestros monoplazas no están creados para una pista de esas características, ya que no resistirían las condiciones desafiantes. Sería, por supuesto, increíble si pudiéramos seguir corriendo en el Nordschleife".

Aunque la Fórmula 1 dejó de correr en el Nordschleife en 1976, los monoplazas han seguido rodando por el 'infierno verde', cita de la novena prueba del calendario de 2013. "Para mí, la mejor parte es pilotar en el Mercedes-Arena y llegar a Müllenbach, entonces bajar a la horquilla Dunlop. No tienes demasiado agarre con un monoplaza de F1, así que vas en tercera o cuarta marcha y sales de ahí. Entonces hacia la S de Schumacher y hacia Wasteiner, y encaras y vas hacia ADVAN", explicaba el tricampeón en referencia a su parte preferida de la pista.

Con curvas de baja, media y alta velocidad, Nurburging es un trazado muy desafiante tanto para el piloto como para el monoplaza y los ingenieros. Sin embargo, el Nordschleife sí que era un auténtico reto para los participantes, reto peligroso. Respecto al 'infierno verde' y a sus características para un coche de F1, Vettel lo tiene claro: es un riesgo. "La conclusión es que el Nordschleife es simplemente demasiado peligroso para la Fórmula 1. No tanto por el diseño de la pista, sino por lo que hay alrededor. Sería una lástima si alguien trata de rediseñar el Nordschleife, por ejemplo por construir zonas de escapatoria. Después de todo, la pista ha permanecido así, es como siempre ha sido y es lo que distingue al Nordschleife".