Sebastian Vettel logró colarse en la primera fila de la parrilla de salida para el Gran Premio de Gran Bretaña tras su última vuelta en la sesión de clasificación. Tras su primer intento en la Q3, el alemán solo pudo marcar el cuarto mejor tiempo, por detrás de los dos pilotos de Mercedes y de su compañero de equipo Kimi Raikkonen. El finés tendría un papel importante dentro de la mejora de Vettel en su último giro.

Raikkonen decidió abortar su última vuelta tras cometer un error y esperó a que Vettel se acercara para darle rebufo en el último sector del circuito de Spa. Esta acción permitió al alemán ganar las décimas necesarias para superar a Bottas y a su compañero y clasificar en segunda posición, solamente por detrás de Lewis Hamilton.

Creo que tuve una pequeña ayuda por parte de un amigo. Raikkonen tuvo que abortar su vuelta y fue muy generoso dándome rebufo en el último sector, lo que me dio dos décimas. Eso ayudó a estar más cómodo con respecto a Bottas”, admitió Vettel tras la clasificación.

“En Q1 estaba muy contento, el coche iba genial. En Q2, el trabajo era pasar el corte. En la primera vuelta de Q3 no tenía buenas sensaciones en la parte delantera. Mi segunda tanda fue mejor en ese sentido y tuve un poco de ayuda, pero fue complicado llegar a la última curva sabiendo que vas más rápido con el rebufo, y nunca es fácil frenar. Me salió bien y crucé la línea de meta”, continuó el alemán.

Por su parte, Raikkonen afirma que dar rebufo a Vettel tras abortar su vuelta fue su propia decisión. No intentéis montaros historias estúpidas sobre ello. Cometí un error e iba a volver a boxes. Obviamente, si puedo ayudar, lo haré. No me costó absolutamente nada ya que iba a entrar al pit lane igualmente. Sabía que Vettel estaba detrás de mí, así que aceleré y le intenté ayudar. No hay más historias detrás de eso”, declaró.