Las quejas por parte de Red Bull sobre la falta de potencia de Renault y como este déficit está afectando significativamente a sus opciones de victoria no son nada fuera de lo común. Durante el fin de semana en Silverstone, Max Verstappen apuntó a que el motor del fabricante francés les hacía perder alrededor de un segundo, una diferencia que les impidió luchar por la pole y por la victoria ante Mercedes y Ferrari.

El neerlandés no tuvo su mejor carrera en el trazado británico, pues tuvo que abandonar la carrera debido a un fallo en los frenos que le causó un trompo antes de que los comisarios retiraran su vehículo. A pesar de protagonizar uno de los mejores adelantamientos del día sobre Kimi Raikkonen, Verstappen volvió a hacer énfasis en cómo el déficit de potencia de Renault les tiene en desventaja con respecto a sus principales rivales.

“No podíamos hacer nada en las rectas porque éramos demasiado lentos. Se podía ver todo el tiempo, especialmente cuando teníamos un coche de seguridad. Parecía que estábamos en una carrera de drag. Éramos tan lentos que parecía una broma”, manifestó Verstappen al terminar la carrera.

“En la primer vuelta tuve un problema con el ‘brake-by-wire’, pero entonces se arregló. Sin embargo, tras el segundo coche de seguridad, el pedal del freno se fue al suelo, los frenos traseros bloquearon y trompeé. Las carreras son así, me ha pasado muchas veces y estoy seguro de que volverá a ocurrir en el futuro. Empezaremos a investigar lo ocurrido, pero incluso sin este problema éramos demasiado lentos en las rectas”, añadió.