Después del abandono de Vettel cuando lideraba la prueba del GP de Europa, el vigente campeón del mundo y el asesor técnico de su escudería, Helmut Marko, sugirieron que la FIA había decidido desplegar el coche de seguridad principalmente para volver a unir al grupo y que se cerrarán así las distancias abiertas hasta ese momento.

"Vettel iba muy por delante y luego el paquete se reagrupó, tal y como hacen en las carreras americanas", recordó Marko, que mostró de paso sus dudas respecto a la necesidad de un Safety Car para que los comisarios pudieran limpiar la pista tras el accidente entre el Toro Rosso de Vergne y el Sauber de Kobayashi.

No obstante, Stuck instó al "señor Vettel" a que en el futuro piense antes de realizar acusaciones que podrían interpretarse como "conducta antideportiva", un comportamiento que a su vez podría desatar la ira de la Federación Internacional de Automovilismo. "Sebastian Vettel debería aprender a ser un buen perdedor", declaró a Yahoo Eurosport Alemania.

"Era evidente que había restos en la pista, los cuales representaban un peligro de pinchazo para los otros coches. Por esa razón, el coche de seguridad estaba justificado", señaló Stuck, al tiempo que rechazó la idea de que el periodo de coche de seguridad causara el problema mecánico del Red Bull.

"No creo que pilotar despacio tras el coche de seguridad pueda ser una causa de rotura, de lo contrario todos los demás monoplazas también habrían fallado. Si el Red Bull se sobrecalienta por un Safety Car, entonces es que está mal diseñado", sentenció el ex piloto de F1.