Lance Stroll y Sergey Sirotkin no son especialmente optimistas para el Gran Premio de España. Mejor dicho, prefieren mantener la calma y no alimentar expectativas sobre el rendimiento de FW41 en el Circuit de Barcelona-Catalunya.

Las cuatro primeras carreras han sido un desastre para los de Grove. De hecho, el erróneo diseño del monoplaza se ha cobrado su primera víctima: Ed Wood, el ya ex jefe de diseño de la escudería británica. Williams trae mejorar a Barcelona –como todos-, por lo que será el paso de la vuelta durante el fin de semana lo que demuestre si hay o no un paso adelante.

“Veremos el viernes, pero por ahora es demasiado pronto para evaluar mi grado de optimismo”, asegura Stroll al Le Journal de Montreal. “Ahora hay que encontrar maneras de mejorar. Quizás el cambio en nuestra estructura sea útil. No lo sé por el momento. Mi función es conducir, añade.

Por toro lado, Sergey Sirotkin fue uno de los hombres más buscados por las cámaras durante los Libres 1 de este viernes en Barcelona. El ruso cedió su volante a Robert Kubica para la primera sesión de pruebas y reconoce que sería difícil estar de la noche a la mañana en mitad de la zona media peleando contra el resto de equipos: “No vamos a estar de repente en mitad de la parrilla, pero sí esperamos un paso adelante”, concluye.

Mercedes comienza por delante de Ferrari en los libres 1 del GP de España

Renault luchará por retener a Sainz en 2019