Después de una larga incertidumbre sobre su presencia o no en la pista árabe de Abu Dhabi, a raíz de unos claros y evidentes problemas económicos, Caterham podrá finalmente disputar la carrera y lo hará con Kamui Kobayashi y Will Stevens como pilotos.

La ayuda económica por parte de diferentes fuentes, entre las que se encuentran el actual presidente de la categoría, Bernie Ecclestone, algunos inversores privados, y la colaboración de los aficionados a través de una campaña de crowfounding ha permitido llevar a la escudería de Leafild a la parrilla de salida del último GP de la temporada.

Una vez confirmada su presencia, llegó el momento de anunciar a los integrantes de sus monoplazas, pues los problemas económicos habían llegado a poner en peligro las actuales relaciones. Así las cosas, Kobayashi era anunciado como uno de los pilotos que iban a tomar parte del equipo, pero tras la salida de su compañero Marcus Ericsson, no estaba nada claro quién era su acompañante. Finalmente, a pocos minutos del límite para confirmar los inscritos en la carrera, Caterham anunció a Will Stevens como su segundo piloto para este fin de semana. Así, el piloto británico ganó la batalla a una terna entre la que se encontraban nombres como Roberto Merhi o Rubens Barrichello.

Stevens, que ya formó parte de la Racing Academy de Caterham y que hasta ahora trabajaba para Marussia, se mostró muy contento y agradecido de la experiencia. Además, no considera en absoluto que esta oportunidad sea algo despreciable, pues cree que le ayudará a continuar en F1 la próxima temporada.

"Obviamente los equipos quieren experiencia, no hay nada como eso. La gente que ha estado en F1 por un largo tiempo puede traerte mucha, pero si puedes entrar y hacer un buen trabajo cuenta para todo. Si lo puedo hacer, entonces es puedo estar en un buen lugar para conseguir un asiento la próxima temporada. Los patrocinadores que tengo detrás de mí es un pequeño grupo de personas que estarán dentro en esta carrera, y ellos quieren que esté en la F1 el próximo año. Estoy en una posición muy buena, así que sólo necesito salir y realizar una gran actuación".

Cuestionado sobre el hecho de tener como compañero de equipo a Kobayashi, un piloto con recorrido en F1 y con cierta experiencia, el británico, lejos de sentirse presionado, se mostraba ilusionado por tenerlo al lado.

"En cualquier equipo que estés, como en F1, tu principal rival es tu compañero. Si miras los resultados de calificación de los últimos eventos, es más o menos ese orden de equipo. Esta es una situación complicada para entrar, pero estoy aprendiendo de alguien que tiene experiencia, así que veremos cómo va la carrera".

Uno de los principales interrogantes es el hecho de cómo va a afectar los limitados recursos que disponen a su actuación este fin de semana. Stevens lo tiene claro y piensa que no tendrá problemas para llevar el coche hasta la bandera a cuadros.

"Todo está bien y me siento cómodo saliendo fuera y empujando al límite. Todos quieren que el coche esté a salvo. Esta es la prioridad número uno no sólo así para cualquier equipo. Estoy completamente seguro de que no habrá problemas con el coche y todo lo que le rodea. Como equipo sabemos que necesitamos hacer para venir aquí. Es una buena oportunidad para mí, y una buena oportunidad para el equipo de mostrar que han vuelto y que quieren seguir en F1".