Daniil Kvyat ha tenido unos meses horrorosos a raíz de su descenso de categoría desde Red Bull, en el que ha tenido que luchar por recuperar la forma, la confianza y la pasión en el equipo junior de la escudería de las bebidas energéticas, Toro Rosso.

Pero en Singapur, tuvo un gran avance. "Me encantó la carrera", ha confesado el joven procedente de Rusia, según el diario O Estado de S. Paulo de Brasil. "Siento la pasión de nuevo y creo que estoy de vuelta a la normalidad. Estos meses han sido una gran prueba para mi entusiasmo, me han empujado hasta el último centímetro", ha añadido Kvyat.

La otra cara de la moneda en Singapur fue el mal pilotaje y el fin de semana sembrado de accidentes de Romain Grosjean. "Desde el principio, yo no podía hacer tiempos de vuelta similares a las de mi compañero de equipo", ha señalado para la revista francesa L'Equipe, en referencia a su compañero en Haas F1, el piloto mexicano Esteban Gutiérrez.

Así, el francés espera que las cosas mejoren para la próxima carrera en Malasia. "No puede ser peor", ha insistido para la cadena francesa Canal Plus.