El circuito de Silverstone se encuentra actualmente en periodo de obras para reasfaltar la totalidad de la pista antes del inicio de su actividad con el objetivo de eliminar los baches. El plan original consistía en llevar a cabo un reasfaltado en la zona entre las curvas de Stowe y Club, pero finalmente se ha decidido extender la reforma al resto del trazado teniendo en cuenta la antigüedad de asfalto en otros lugares de la pista.
Las quejas sobre el número de baches existente en Silverstone han venido especialmente de pilotos de MotoGP, cuyas máquinas son más sensibles a estos desperfectos de la pista que los coches. El circuito espera que el reasfaltado finalice a finales de febrero, por lo que los Grandes Premios de Gran Bretaña de Fórmula 1 y de MotoGP contarán con un nuevo asfalto que los competidores tendrán que tener en cuenta a la hora de elegir neumáticos y configurar las respectivas máquinas.
La Fórmula 1 no tendrá mucho tiempo para experimentar este nuevo asfalto. El Gran Premio de Gran Bretaña podría desaparecer del calendario de la categoría reina del automovilismo tras la decisión de Silverstone de activar la cláusula de rescisión de su contrato y albergará su última carrera de Fórmula 1 en 2019 si no se llega a un nuevo acuerdo con Liberty Media.
Por su parte, MotoGP anunció recientemente la extensión del contrato de Silverstone hasta 2020 a pesar de los rumores que indican que la prueba podría trasladarse a Donington Park. Los retrasos en la construcción del Circuito de Gales han permitido a Silverstone mantenerse en el calendario del mundial de motociclismo como solución provisional, pero parece que el evento no se moverá del trazado mientras no haya otras alternativas viables.
