La jornada de entrenamientos libres del viernes del Gran Premio de Australia no ha dado los frutos esperados por Sebastian Vettel. El piloto alemán finalizó ambas sesiones en quinta posición, quedándose a medio segundo del tiempo marcado por Lewis Hamilton al frente de la tabla de la segunda práctica. A pesar de estos discretos resultados con los que ha dado comienzo al fin de semana en Melbourne, Vettel admite estar tranquilo con respecto a las posibilidades de la Scuderia en la primera clasificación del año.

“No estoy demasiado preocupado. Creo que todavía tenemos mucho rendimiento que sacarnos de la manga. Sé que si consigo que todo salga bien, deberíamos estar en mejor forma. Parece que todo está muy igualado, lo que son buenas noticias. Realmente creo que tenemos algo más por mostrar”, comentó Vettel al terminar la jornada.

El tetracampeón del mundo afirma que no se encuentra totalmente cómodo con el nuevo SF71H y reconoce que todavía queda trabajo por hacer antes de la sesión clasificatoria, la cual podría disputarse en condiciones de mojado si se cumplen las predicciones meteorológicas para el sábado. “Intentamos mejorar el balance porque todavía no me siento muy cómodo. No estaba contento con la vuelta rápida y con el ritmo que tenía, explicó Vettel.

“Melbourne es un circuito complicado. Si no te sientes al 100%, entonces llega un momento en el que de repente ganas confianza. Si estamos igualados, significa que podemos hacer algo. Espero que se mantenga así de ajustado. Queda más por venir, aunque creo que es lo mismo para todo el mundo. Es complicado decir cuánto mejorará el resto”, añadió el alemán.

“Normalmente, después de un par de carreras sabes cuánto está mejorando todo el mundo. Sabes dónde tienes que estar el viernes para poder luchar por la pole, pero este año todo es nuevo y hay que esperar. Ojalá podamos dar un salto más grande que el resto. Deberíamos ser capaces de hacer algo mañana”, concluyó.