La escudería Sauber anunció cuatro días antes del arranque de la pretemporada que el que hasta entonces había sido su director técnico, James Key, abandonaba la formación. Tras aceptar una oferta laboral en Reino Unido, el británico dimitió de su cargo en Hinwil, situación que ha obligado al equipo a reestructurar su departamento técnico.

A pesar de que la renuncia de Key llegó en un momento inoportuno para la escudería, a escasos días de la presentación del C31, el patrón de la formación suiza, Peter Sauber, ha asegurado que la marcha del ex director técnico ha sido una buena resolución para el equipo. "Se hizo más y más obvio que la cooperación no estaba funcionando como los dos lados habíamos esperado. Así que tomar caminos separados era la única decisión lógica", afirmaba Sauber en una entrevista a la página oficial de la Fórmula 1.

"James se unió a nosotros en una fase en la que tuvimos que sufrir la dolorosa transformación de ser fabricante a ser un equipo privado. Él fue uno de los factores clave en el regreso a la estabilidad de nuestra escudería", añadía el patrón de Sauber.

Key se unió al equipo de Hinwil en 2010. Tras ser nombrado director técnico, trabajó para consolidar la formación suiza como una de las escuderías más competitivas de la parrilla. Sin embargo, la tarea más importante fue reconvertir la escuadra en un equipo independiente y privado después de la salida de BMW de la Fórmula 1. Dos temporadas como figura crucial en Sauber, Key dimitió de su puesto para aceptar una oferta laboral en Reino Unido de la que no se han revelado detalles.