El piloto de Sauber, Pascal Wehrlein, no recordará con cariño las primeras semanas de la temporada. Su accidente en la ‘Race of Champions’ celebrada el pasado mes de enero supuso un largo periodo de recuperación para el piloto alemán, por lo que tuvo que perderse las dos primeras pruebas del año disputadas en Australia y China.

Sin embargo, Wehrlein asegura que el pronóstico inicial era más pesimista, pues su regreso estaba previsto para el Gran Premio de España, celebrado el pasado fin de semana. De ese modo, el piloto alemán comenzó una recuperación contrarreloj, con el objetivo de reducir los tiempos y estar listo cuanto antes.

"El equipo pensó que mi primera carrera sería en Barcelona. No podía creer que me perdiese cuatro carreras, por lo que dije: 'Antes que Barcelona'", asegura a la web estadounidense Motorsport.com.

Así, tras un duro programa de entrenamiento y rehabilitación, Pascal fue capaz de estar de vuelta para el GP de Bahréin, en parte, gracias al trabajo conjunto con su preparador físico Josef Leberer.

"Trabajar con Josef, alguien con mucha experiencia, quien ha tenido éxito en este deporte y muchos títulos, y el trabajo con muchos grandes pilotos es, por supuesto, bueno para mí, porque aprendo mucho de su experiencia. Cuando me dijo que Barcelona debería ser mi primera carrera, fue una gran motivación: 'No, no será en Barcelona, será antes'. Les demostré que estaba haciendo todo lo posible, entrenando muy duro para volver antes, fue una gran motivación para mí. Por supuesto, me ayudó en todo lo que podía con toda su experiencia. Creo que sin todo ese apoyo, probablemente todavía no estaría de vuelta", señala.

De ese modo, el compañero de Marcus Ericsson asegura sentirse muy feliz con su actual situación dentro de la formación suiza, con lo que asegura dar el máximo de su rendimiento.

"Estoy centrado en dar el máximo en cada carrera, el máximo rendimiento. Me siento feliz con el coche y el equipo. Todo es bueno", concluye.