La carrera del Gran Premio de Singapur estuvo marcada, entre otras cosas, por el roce entre los pilotos de Toro Rosso, Carlos Sainz y Max Verstappen.

Después de que desde el muro pidiesen al holandés que se dejase adelantar por el español para poder luchar por posición con Sergio Pérez, el joven rookie decidió no obedecer y mantener su posición y su lucha, algo que posteriormente acabó siendo defendido por el equipo.

Con lo ocurrido ya aparacado y lejano en el tiempo, Sainz ha indicado que siempre ha estado a disposición de las órdenes del equipo fuera cual fuera la situación.

"Siempre necesitas mostrar un poco de egoísmo si eres un campeón, pero en mi opinión, la mejor posición a largo plazo que puedes hacer es escuchar al equipo. Soy un piloto de equipo, lo he dicho desde el comienzo y pienso que lo he demostrado, confío en ellos y sé que si me vuelvo contra ellos no voy a ir ningún lado", ha señalado antes de admitir que, si la situación lo requiere, también será egoista.

"Hasta el momento no he tenido la oportunidad de demostrar mi egoísmo porque he confiado en ellos, cada vez que han llamado para un cambio de posición lo he hecho, pero cuando necesite ser egoísta, no te preocupes, lo seré", ha concluido.