Sebastian Vettel y Max Verstappen comenzaron la carrera en Singapur desde la primera fila de la parrilla. La agresividad del piloto neerlandés fue uno de los atractivos que pusieron emoción a la salida, pues el de Red Bull estaba dispuesto a arrebatarle la primera posición al alemán al llegar a la primera curva. Al final, ambos y Kimi Raikkonen tuvieron que decir adiós a la carrera tras sufrir un accidente en los primeros metros.

Dados los alicientes, la posibilidad de que hubiera un accidente entre los implicados no era para nada descabellada, ni siquiera para algunos pilotos de la parrilla. Daniel Ricciardo bromeó horas antes de darse la salida con las probabilidades de que se diera tal circunstancia. Todavía creo que podemos ganar. Idealmente, Verstappen echará a Vettel, dijo el australiano en el desfile de pilotos anterior a la carrera.

"Puede pasar cualquier cosa en la salida"

No fue el único que esperaba que el accidente sucediera. Lewis Hamilton, tras una mala clasificación que le puso por detrás de Ferrari y de Red Bull, el británico no descartó que pudiera haber incidentes tras apagarse los semáforos. Vettel tiene a Verstappen al lado, así que puede pasar cualquier cosa en la salida, expresó el actual líder del mundial.

Al contrario que su compañero de equipo y el piloto de Mercedes, Verstappen quería tener una salida limpia en la que pudiera luchar con Vettel por el liderato de la carrera. Finalmente, los aficionados se quedaron sin poder disfrutar de un esperado duelo que todavía no se ha podido dar llegando a la parte final de la temporada.