La mala suerte volvió a cebarse con Daniel Ricciardo en el Gran Premio de México. El piloto australiano dio la sorpresa al arrebatarle la pole a Max Verstappen por apenas 26 milésimas cuando el neerlandés había liderado los entrenamientos libres y era el favorito para la clasificación. Esta primera fila de Red Bull dio la oportunidad al equipo austriaco de firmar su primer doblete desde Malasia en 2016, pero en carrera la fortuna de Ricciardo cambió.

El ‘aussie’ estaba luchando por el podio cuando su Red Bull dijo basta y tuvo que retirarse de la prueba, sumando de esta manera su octavo abandono de la temporada. Esta retirada de suma a una larga lista de contratiempos sufrida por Ricciardo a lo largo de la campaña, motivo por el cual el australiano estalló debido a la frustración ante los medios tras bajarse del coche en México.

“No hay esperanza. Ahora mismo, no veo sentido a correr el sábado ni a participar en las siguientes carreras. No he tenido ningún fin de semana limpio en mucho tiempo. No soy supersticioso ni nada, pero… El coche está maldito. Los domingos están pasando algunas cosas que no me explico. Dejaré que Gasly pilote el coche, yo no puedo más”, declaró Ricciardo.

Ante esta muestra de desesperación por parte del australiano, muchos comenzaron a pensar que iba en serio cuando decía que no quería correr en las últimas dos carreras del año. Unos días después de la carrera en México, Ricciardo ha publicado un vídeo en Instagram confirmando que va a terminar la temporada con Red Bull antes de irse a Renault en 2019.

“Solamente quería decir buenos días y explicar algunas cosas de México. Primero, voy a estar en las dos últimas carreras. Obviamente, he tenido grandes altibajos este año, con desafortunadamente más bajos. Ha sido frustrante, no voy a mentir. Tengo puestas las esperanzas en mí mismo y en los chicos que trabajan duro para intentarlo dos veces más antes de separarnos. Así que estaré ahí. Solo necesitaba un par de días de descanso”, comentó Ricciardo.

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