El director de Renault, Cyril Abiteboul, ha reconocido que fueron demasiado ambiciosos en el desarrollo de su actual unidad de potencia. El hecho es que los problemas de fiabilidad aparecieron desde la pretemporada, unos fallos que el francés asegura que no esperaban, aunque todo ello conllevó a que el motorista galo tuviese que recurrir a su MGU-K de la temporada pasada para paliar los problemas.

"No puedo parecer profesional si digo que esperábamos estos problemas, porque no diseñamos un nuevo motor esperando que no funcione. La realidad, la cual sigue siendo frustrante, es que no tuvimos un buen diseño inicial. Habiendo dicho esto, hemos hecho mucho en cuanto al motor, la arquitectura del ICE es totalmente diferente y el ERS es completamente diferente. Podemos desafiar la decisión de hacer eso en invierno y, francamente, creo que hemos hecho demasiado", explica a la web estadounidense Motorsport.com.

Así, Abiteboul cree que uno de los factores para justificar, en la medida de lo posible, estos problemas es el hecho de que Renault cuenta con una plantilla joven y con menor experiencia que hace años, por lo que “la falta de calidad se debe a la falta de experiencia”.

"Cuando empiezas a tener algunas dificultados con la fiabilidad, empiezas a hacer mezclas en el garaje. Coges el MGU-H de un motor, coges el turbo de otro, coges el MGU-K de otro y empiezas a crear un monstruo. Todo ello multiplica la operación y ha sido muy difícil para los chicos del motor, quienes también, con todas las operaciones que han hecho, comenten algún error con los dedos. Eso ha hecho que la situación sea a peor. Es un círculo vicioso muy poderoso. Habiendo dicho eso, por el lado del chasis, también hemos tenido un par de fallos de fiabilidad. El último en la vuelta de instalación de Palmer en SIlverstone, la cual no tuvo ninguna relación con el motor. Fue un problema con el asistente de potencia y es una gran frustración. El equipo es joven. Hemos tenido un gran volumen de cambios con los mecánicos y en la fábrica. La gente está ganando experiencia y, para mí, la falta de calidad se debe a la falta de experiencia", indica.

"La falta de calidad se debe a la falta de experiencia"

Respecto a la presente temporada, el francés cree que servirá para asentar las bases del proyecto y, con suerte, cree que a partir de 2018 podrá comenzar a trabar para extraer el máximo rendimiento al motor.

"Está casi detrás de nosotros, pero también es un año de consolidación respeto al motor. El próximo año habrá mucha más estabilidad y podremos concentrarnos en extraer más rendimiento de los diferentes componentes que hemos introducido y esperemos que de una manera mucho más fiable", concluye.