La Fórmula 1 llega a la cita más importante de la temporada para Red Bull: el Gran Premio de Austria. La estructura de las bebidas energéticas corre en casa y espera ofrecer a los aficionados que se acerquen al Red Bull Ring un buen resultado. La escudería austriaca se prepara para afrontar del fin de semana con muchas ganas después de obtener un mejor resultado del esperado en Francia con el segundo puesto de Max Verstappen.

También será una cita muy especial para el neerlandés, pues el trazado contará con una grada llena de fans del piloto. “El Gran Premio de Austria siempre es especial. Por supuesto, es la casa de Red Bull, así que habrá muchos aficionados austriacos y neerlandeses. Este año habrá una grada llena de fans neerlandeses, lo que lo hará todavía más especial. De hecho, hay un camping neerlandés fuera del circuito que contará con unos 5.000 aficionados”, comentó Verstappen.

Hace dos años estuve en el podio, así que estaría bien volver ahí esta temporada en frente de los aficionados. El año pasado la carrera terminó demasiado pronto por un toque en la primera curva, así que tendré que compensarlo este año. El circuito es divertido. El segundo sector es mi favorito. Hay dos curvas rápidas a izquierdas consecutivas, lo cual es muy divertido”, añadió.

Daniel Ricciardo logró subirse al podio el año pasado y buscará repetir tal resultado esta temporada. “Es una vuelta corta, pero es una muy ocupada. El segundo y el tercer sector son muy rápidos, De hecho, las dos últimas curvas son mis favoritas, sobre todo con los coches actuales. La carrera es intensa y a alta velocidad desde el principio, así que hay que mantener la concentración”, explicó.

“Como la vuelta es tan corta, no hay margen de error. Un pequeño error puede costar caro ya que los tiempos están muy igualados. Es bueno ver a tantos fans de Red Bull este fin de semana ya que es la carrera de casa del equipo. Las gradas siempre están llenas y las colinas son alucinantes cuando sale el sol”, señaló el australiano.