Fernando Alonso ha sido un piloto muy ocupado en las últimas cinco semanas. El piloto asturiano tuvo que compaginar su participación en las 24 Horas de Le Mans con cuatro Grandes Premios de Fórmula 1, tres de ellos en semanas consecutivas. La tarea de Alonso se puede ampliar hasta las siete semanas si se cuenta su labor en los test previos a la cita francesa en lo que sin duda es un calendario muy comprimido.

La victoria en Le Mans fue el momento más destacado de unas semanas que han tenido resultados dispares para Alonso. Varios octavos puestos fueron los mejores resultados del asturiano con McLaren en una realidad muy distinta a la que pudo disfrutar en el Mundial de Resistencia (WEC), donde fue uno de los favoritos a hacerse con el triunfo desde el primer momento.

“Fue muy exigente. No fue fácil, como nos esperábamos. Estaba de viaje de miércoles a domingo, deshacía las maletas el lunes para hacerlas el martes. Fue así durante siete semanas consecutivas. La semana de Le Mans fue especialmente intensa con el test, el drivers parade y las 24 horas. Fueron como 40 horas en total en pista con el warm up”, declaró.

Alonso contará con su primer fin de semana de descanso antes de poner rumbo a Hockenheim para disputar el Gran Premio de Alemania. “Fue exigente, pero intentaremos disfrutar ahora de los próximos días, regresando a una rutina de entrenamiento y relajándome un poco. En septiembre, octubre y noviembre volveré a hacer lo mismo con ocho carreras en nueve fines de semana en diferentes zonas horarias”, comentó.