El responsable de Pirelli en la Fórmula 1, Paul Hembery, ha comunicado que habrá cambios en cuanto a los neumáticos a partir del Gran Premio de Canadá, que se celebrará del 7 al 9 de junio. El británico ha señalado que se modificará la estructura de las gomas con el objetivo de que haya dos o tres paradas en boxes, además de que tales cambios conllevarán la convivencia de las características de 2012 y 2013. Así lo confirmaba Hembery en su Twitter personal: "Desde Canadá se harán cambios para volver a dos y tres paradas. Habrá algunos cambios estructurales que combinarán elementos de los productos de 2012 y 2013".

Confirmada la información, se desconoce la magnitud de los cambios, por lo que la marca italiana mantendrá reuniones en Milán a lo largo de la semana para evaluar el alcance y detallar dónde introducir las modificaciones. A todo ello, Hembery añade: "Nunca tuvimos previsto cuatro paradas en una carrera, así que vamos a hacer cambios en los neumáticos. Cogeremos algo del diseño de los neumáticos de 2013, pero también algunos de los elementos de los productos de 2011 y 2012 que nos funcionaron tan bien durante ese período. Queremos volver a tener dos o tres paradas en carrera", aseguraba a Autosport.

Tras la carrera en España, el responsable de Pirelli en la Fórmula 1 ya mostró su rechazo a la situación de cuatro pit stop en carrera y afirmó que la intención de la compañía era reducir el número de paradas al mismo tiempo que comunicaba cambios para el Gran Premio de Gran Bretaña. "Nuestro objetivo es tener entre dos y tres paradas en cada carrera, por lo que cuatro nos ha resultado excesivo. Vamos a hacer algunos cambios a tiempo para Silverstone para asegurarnos que podemos mantener nuestro objetivo y resolver cualquier problema rápidamente". Así, las modificaciones llegarán para Canadá, antes de lo pensado por Hembery.

"Hemos tomado esta determinación para evitar la delaminación causada por los restos en pista. Es importante puntualizar que este fenómeno, que sucede cuando se desprende la banda de rodadura, no compromete en ningún modo la seguridad estructural del neumático, ayudando a los pilotos a completar su vuelta y realizar el cambio de la cubierta deñada. Estas delaminaciones son producto de los daños causados por los restos en pista que recalientan la banda. Nos gustaría agradecer a todos los equipos por su continuo apoyo y su valioso soporte en nuestro trabajo conjunto por identificar el correcto compromiso entre la velocidad pura que nos ha convertido en líder del segmento de Super Altas Prestaciones y el espectáculo global que atrae a los fans de la Formula Uno".

El británico afirma que el limitado tiempo de test que tienen los equipos, hacen que las pruebas tengan que realizarse en condiciones distintas a las que luego se viven en las carreras y eso acaba afectando al rendimiento de los equipos, ya que los datos que manejan son muy distintos a las condiciones que se encuentran a la hora del Gran Premio y es por eso que piden más tiempo de pruebas y distintas localizaciones para los entrenamientos.

"El limitado tiempo de pruebas, ha revelado ahora que nuestra gama 2013 original estaba, probablemente, demasiado orientada a las prestaciones, teniendo en cuenta las regulaciones actuales. Sin embargo, tras haber identificado este hecho, tenemos la determinación de resolverlo rápidamente. Debemos subrayar que la normativa vigente sobre pruebas invernales limita las oportunidades de probar los neumáticos en las mismas condiciones que pueden darse durante la propia temporada, debido al tiempo restringido y a las bajas temperaturas. Los equipos comparten este punto de vista y reclaman más tiempo de pruebas y diferentes localizaciones para los próximos tests. Hemos desarrollado la gama 2013 siguiendo cuidadosas simulaciones pero, sin embargo no ha sido suficiente, si tenemos en cuenta la mejora en términos de velocidad de los coches (de más de 3 segundos por vuelta)"

Consciente de las críticas y quejas por buena parte de los protagonistas de la F1, el británico desmiente que vayan a favorecer o a perjudicar a según qué equipos con los cambios estructurales que se esperan para Canadá. "No queríamos hacer demasiados cambios dramáticos y no queremos penalizar a aquellos equipos que han tomado una dirección adecuada para cuidar los neumáticos. Igualmente, tenemos que hacer algo para mejorar la situación", comenta el responsable de Pirelli Motorsport.

Hembery defiende el trabajo de Pirelli alegando que su actual monoplaza de pruebas, un Renault de 2010, no tiene el mismo rendimiento, velocidad y especificaciones que los de la actual campaña. "No podemos entrenar con los monoplazas actuales y todo a lo que tenemos acceso es a un Renault de 2010 que hace una vuelta cuatro o cinco segundos más lento que los actuales monoplazas de F1 un domingo. Así que se han juntado una combinación de factores", añade a Autosport.