Las últimas temporadas, el Gran Premio de Estados Unidos ha sido lo más cerca que ha tenido Sergio Pérez de tener un circuito ‘de casa’ pero este año dejará de serlo ya que en poco menos de una semana, México celebra su cita inaugural en el Autódromo Hermanos Rodríguez. Checo llega a Austin sabiendo que este domingo será sólo un calentamiento con respecto a la gran fiesta que se vivirá en México el próximo fin de semana, que celebrará su primer GP desde 1992.

"Como mexicano, no teníamos mucha historia en nuestro deporte. El último mexicano que hubo en la Fórmula 1 fue hace 20 años. Así que básicamente para llegar al Gran Circo tuve que dejar mi casa a los 14 años. Básicamente hice toda mi carrera en Europa, hice sólo un par de años de karting en México", confiesa en una entrevista para la agencia Reuters.

El de Force India sólo espera cosas buenas de esta etapa de su carrera en la que se encuentra. "No me entendáis mal. Estoy aquí para ganar campeonatos y carreras. No es que esté muy cómodo con lo que he conseguido pero es algo muy especial para mí el hecho de pilotar en mi país. No importa el resultado que logre el domingo, porque los domingos nunca sabes qué va a pasar, será simplemente un momento muy especial de mi carrera", explica.

En su etapa de karting no imaginó que se fuera a celebrar nunca un GP en su país. "Pensé que esa había sido mi última carrera en México y esperaba no regresar nunca a pilotar en mi país. Quería rodar fuera de México. Mi objetivo era siempre la F1, aunque tuvimos muchos pilotos en Indy Car, quería tener éxito. Quería pilotar contra los mejores pilotos del mundo porque me siento como uno de ellos así que me quería probar contra los mejores de Europa. A los 10 u 11 años estaba compitiendo contra pilotos de 20 ó 25. Es algo que en otras partes del mundo no podrías hacer. Eso realmente me ayudó en mi carrera. Sentí que esos días de karting fueron muy buenos para mí. Cada vez que viajábamos, eran al menos 10 horas y después de que la carrera acabase, dormía en la caravana, me cambiaba y me ponía el uniforme para ir a la escuela y mi padre me llevaba a la escuela. Así viví cuando era joven", finaliza Pérez.