El mexicano perdió agarre en el tren delantero, subviró y atravesó la grava hasta chocar con la barrera de neumáticos.

Sam Michael, director deportivo de McLaren, ha comentado lo sucedido: "El problema principal era que los neumáticos estaban bastante gastados y había hecho un último sector bastante lento. Eso llevó a que los neumáticos delanteros perdieran temperatura de forma significativa. Perdió mucho grip".

"Para ser sincero, quizás también podríamos haberle avisado del peligro durante la vuelta de regreso", se ha excusado el propio Michael.

Según el ingeniero británico, tanto el morro como el alerón delantero que montaba en ese momento el MP4-28 de Pérez eran antiguos con lo que no se ha perdido nada importante. "Afortunadamente, el alerón tenía especificaciones antiguas con lo que no es un problema. Todo estará listo para la segunda sesión". El percance del mexicano no compromete el programa deportivo de McLaren previsto para este fin de semana.