La edición número sesenta y tres del Campeonato del Mundo de Fórmula 1 abre sus puertas este fin de semana en el circuito urbano de Albert Park en Melbourne con algunas variaciones en el reglamento, entre ellas la ausencia del polémico difusor soplado. La escudería británica Williams llevara su nuevo monoplaza, el FW34 y dos jóvenes procedentes de suramérica, Pastor Maldonado y Bruno Senna, serán los encargados de intentar sacar a la escudería de la enorme crisis de resultados por la que pasa, tras haber solventado aparentemente la financiera.

Williams comenzará esta nueva temporada con un socio junto al que ha acumulado galardones: Renault. Durante esta temporada, los coches de Sir Frank Williams llevarán los motores franceses, los mismos que usan Red Bull, Caterham y Lotus.

"Podemos considerar nuestra pre-temporada como exitosa: nuestro Williams-Renault FW34 completó 5.330 kms, la mayor cantidad de kilómetros realizados de entre los coches nuevos que estarán en la parrilla esta temporada. En las tres tandas de pruebas, tanto Pastor como Bruno y Valtteri pilotaron de forma excepcional y los dos primeros se han integrado perfectamente en sus trabajos con visitas semanales a la fábrica y al simulador", remarcó Mark Gillan, ingeniero jefe de Williams.

El equipo con sede en Grove tiene por delante un doble reto: lograr la eficiencia del nuevo monoplaza y garantizar el acoplamiento con el motor Renault para alcanzar resultados tangibles. "El equipo trabajó duro sin parar durante todo el invierno para erradicar nuestros puntos débiles de 2011 y hasta ahora, la integración del nuevo motor RSF1 ha resultado como se esperaba: fuerte, flexible y con degradación de rendimiento mínima, ante lo cual Melbourne se presenta como una prueba de alta exigencia para nuestro estreno", agregó Gillan. Williams vivió su época dorada en la Fórmula 1 en alianza con Renault cuando ganó cinco de sus nueve títulos de constructores y cuatro de sus siete Campeonatos de pilotos.

En 2012, la confianza en el venezolano Pastor Maldonado juega papel fundamental para las aspiraciones de Williams. Tanto Adam Parr, presidente del Equipo, como su fundador Frank Williams, el director de operaciones Mike Coughlan y el propio Gillan coinciden en señalar que si el venezolano cuenta con un buen coche, será un visitante permanente en la Q3 y en la zona de puntos. La meta trazada en Grove, implica al menos estar a la par de Mercedes.

"Cada miembro del equipo tiene el compromiso de alcanzar resultados y tenemos las herramientas para ello. Siento que vamos por muy buen camino con el coche y este fin de semana veremos los primeros resultados del esfuerzo realizado en la pretemporada y en la fábrica", manifestó Pastor Maldonado desde Australia.

En las tres citas de ensayos colectivos, celebradas en Jerez y Barcelona, Williams se hizo notar en los registros, con el criollo encabezando la tabla de tiempos en la jornada de Barcelona, siendo segundo el viernes y el brasileño Senna con el tercer mejor crono en la tanda final de Cataluña. "En las pruebas, los tiempos no son una referencia exacta ya que únicamente sabes lo que está probando tu equipo y no los demás, pero en nuestro caso avanzamos mucho con el desarrollo del coche", insistió Maldonado .

El piloto venezolano conducirá el FW34 identificado con el número 18, dígitos derivados de la posición que ocupó el equipo en 2011 (9º) y va cargado de optimismo a su segunda temporada en la máxima categoría. "Albert Park es un circuito interesante por ser urbano y esperamos tener un buen fin de semana. Ya tengo experiencia allí y ahora voy con mayor confianza para lograr resultados para mi país y para el equipo", añadió el de Williams.

El año pasado, ante el asfalto habilitado en la propia ciudad de Melbourne en torno al lago Albert Park, Pastor debutó en la Fórmula 1 superando la primera ronda de clasificación y a pesar de mostrar solvencia en la Q2, no logró pasar de allí, limitado por banderas amarillas en pista y por pasarse de frenada. Con su crono de 1:26.768, alcanzó el puesto quince y el derecho de salir desde la octava línea de parrilla.

En carrera, problemas en la transmisión acabaron prematuramente con su debut al obligarle a abandonar en la decimoprimera vuelta, cuando había logrado algunos adelantamientos y había avanzado una plaza desde la salida. "Estoy impaciente con que empiecen las carreras", agregó el de Maracay quien a pesar de la poca competitividad del FW33 en 2011, logró meter a su equipo tres veces en la Q3 y estuvo a punto de concretar una gran actuación en Mónaco, hasta que fue sacado de pista y logró su primer punto en el legendario Circuito de Spa-Francorchamps, donde terminó décimo tras salir en parrilla desde el puesto vigésimoprimero.