Coincidiendo con el Gran Premio de Canadá, la escudería Red Bullanunció la firma de un contrato multianual con Adrian Newey que le hará centrarse más en proyectos de tecnología Red Bull que en F1, donde se encontraba su labor principal hasta ahora. Ante la necesidad de retos del veterano ingeniero, éste ha decidido realizar un cambio de rumbo en su carrera.

"Cuando era un chaval, todo lo que quería hacer era trabajar en deportes del motor como diseñador. Tuve la suerte suficiente, cuando me gradué, me introduje en los deportes de motor en el área de aerodinámica, y por fortuna he estado trabajando en eso desde entonces", explicó Newey.

Aunque, sinceramente, este ingeniero confiese que ha pasado años muy positivos trabajando tan cerca de este deporte, indica que uno de los factores que le obliga a desvincularse de él son las tan restrictivas reglas, al igual que criticadas, que han entrado en vigor en esta temporada.

"Ha sido una época de mi vida fantástica. Me ha encantado pero es el único trabajado que he tenido, como ingeniero de diseño en deportes de motor. Creo, para ser sincero, que las regulaciones actuales son muy restrictivas, es una pena, así que eso hace muy difícil encontrar nuevas áreas para explorar. Al mismo tiempo, me gustaría ver si puedo desarrollar mis habilidades en otras disciplinas", añadió el británico.

De todos modos, Newey llama a la calma a los seguidores de su escudería y señala que habrá un período de transición y que, desde su nuevo cargo, espera transmitir algo de su experiencia a otros ingenieros de Red Bull.

"Estaré totalmente involucrado con el equipo los próximos meses. Durante ese tiempo, estudiaremos la estructura de la ingeniería que utilizaremos en el futuro, y cuando me disponga a abordar los nuevos proyectos, volveré y adquiriré un cargo de consejero, por así decirlo, enseñaré a algunos de mis compañeros ingenieros. Si tienen preguntas o necesitan mi consejo, les ayudaré", apuntó.

Además, por su parte, el jefe de Sebastian Vettel y Daniel Ricciardo, deja la puerta abierta a un posible regreso a la F1 si, en algún momento, lo estricto de las regulaciones se relajase, de tal manera que éstas volviesen a ser más de su agrado.

"Es bastante possible. Como he dicho, he llegado a un momento de mi carrera en el que me gustaría probar otras cosas, lo que sea. Todas estas cosas son pasajeras. Tengo 55 años y no estoy preparado para la playa todavía, así que me dedicaré a esto un poco más y veremos lo que pasa después", finalizó.