Adrian Newey ha ofrecido sus primeras impresiones sobre la nueva regulación tras mostrar al mundo el nuevo monoplaza del equipo Red Bull, el RB10. El británico cree que los cambios introducidos por la FIA en la parte de los morros podrían suponer un peligro para los pilotos.

"Las regulaciones han sido introducidas después de un estudio por parte de la FIA, pensando que el morro de los coches reduce la posibilidad de que estos salgan volando–como en el accidente de Mark (Webber) en Valencia 2010", ha dicho en Jerez. "Pero tengo que admitir que sé que podría ocurrir lo contrario. Así que si golpeas a otro coche por detrás, te irás debajo de él, y acabarás debajo de la estructura trasera del coche, lo que considero que es un escenario mucho peor", ha explicado el inglés, que también se ha centrado en la estética de los nuevos monoplazas al aplicar estas soluciones.

"Es una pena que las regulaciones creen soluciones feas, como ya hemos visto en algunos coches que han sido presentados. Aunque no es un asunto estrictamente técnico, ya que tenemos que diseñar un coche que sea lo más rápido posible sin importar el estilo. Pero creo que la forma de los coches y el sonido de los coches, todo forma parte del teatro de la Fórmula 1. Es una pena que los coches sean poco atractivos".

No obstante, los morros de los coches no es lo único que perturba al diseñador de Red Bull, dado que no ve coherente que la batería del monoplaza no se pueda situar en otro sitio que debajo del tanque de combustible, en el centro del coche, teóricamente, por temas de seguridad.

Hasta ahora, Red Bull había colocado su bacteria debajo de la caja de cambios, en la parte trasera del coche, en busca de una compensación de peso ideal en el auto, algo que han tenido que cambiar para este 2014.

"El cambio en la normativa con respecto a la posición de la batería lo han hecho por un tema de seguridad, pero no estoy seguro de si poner la batería debajo del tanque de combustible es más seguro que colocarla debajo del motor ;es un territorio inexplorado", ha afirmado. "No creo que se trate de un tema de seguridad para el piloto, porque sigue siendo un peligro", dado que "los voltajes son muy elevados. Los voltajes DC son muy peligrosos, mucho más que los AC, así que de cara a la seguridad del pitlane, estos coches son un gran peligro, ya que será muy difícil controlar el fuego", si hay un problema con el tanque de combustible, junto con la batería del monoplaza, ha finalizado Newey.

Fotos: El Red Bull RB10 en imágenes

Red Bull presenta su RB10 en Jerez con Vettel y Ricciardo