"No me he arrepentido ni un segundo de volver. Ha habido un montón de buenos momentos, aunque desde fuera no lo haya podido parecer", ha comentado Michael Schumacher en declaraciones al diario Bild am Sonntag.
El heptacampeón, ganador de 91 Grandes Premios, cree que "sería una pena" retirarse sin volver a subirse al cajón más alto del podio. Por el momento, lo más cerca que ha estado ha sido en Valencia, cuando cruzó la línea de meta en tercer lugar por detrás de Fernando Alonso y Kimi Raikkonen.
Este fin de semana, el veterano piloto celebrará su Gran Premio número 300 en Spa-Francorchamps. "Era de alguna manera casi inevitable y tendremos que celebrarlo de la manera adecuada", aseguraba Schumacher. El alemán será el segundo piloto tras Rubens Barrichello en conseguir llegar a esta cifra, un hecho que le hace sentir "muy orgulloso".
"No cabe duda de que será un fin de semana particularmente bonito. Esperábamos un buen rendimiento en Spa el año pasado y haré todo lo posible para hacer una gran carrera".
En cuanto a su futuro en la F1, Schumacher intenta evitar cualquier referencia. El alemán admitió sentirse bien en la categoría, pero no quiso dar ninguna pista de si en 2013 estará a los mandos de un W04. "No hace falta que hablemos de ganar el campeonato este año, y todavía no está claro si el viaje seguirá el año que viene".
