Maurizio Arrivabene ha asegurado que Daniil Kvyat no puede justificarse tras haber chocado dos veces con Sebastian Vettel en lo que va de año. El alemán se enfureció después de haber tenido que abandonar en Sochi por culpa del ruso, e incluso el jefe de Kvyat, el Dr. Helmut Marko, ha admitido que su 'pupilo' lo hizo mal.

"Esta vez él (por Vettel) estaba molesto y con razón, sí", ha señalado Marko a motorsport-magazin.com. Cuando se le preguntó sobre lo que había dicho Vettel a las autoridades después del incidente Sochi, Marko reveló que el tetracampeón les pidió que hablaran con el ruso. "Pues tenemos que tener alguna palabra seria con Kvyat y tiene razón", ha añadido Marko.

Los incidentes se producen exactamente en un mal momento para el ruso de 22 años de edad, en medio de especulaciones desde Red Bull, sobre la promoción de Max Verstappen al primer equipo para el 2017. Kvyat admitió que se equivocó. "No soy Superman", ha indicado Kvyat para la emisora finlandesa MTV. "Si alguien se ralentiza en una curva tan rápido, no tuve tiempo de reaccionar", ha agregado.

"Cuando miro nuestros datos, no puedo compartir esa impresión. Creo que sólo tiene que mirar las imágenes de televisión y todo está claro. Siempre he prometido a los medios que yo quiero ser honesto. Así que dije después de China que Kvyat no hizo nada malo. No me puedo quejar. Kvyat hizo su trabajo en Shanghái. Pero esta vez realmente no pude encontrar nada que pudiera pasar como una excusa para el ruso", ha comentado Arrivabene.

Incluso en el equipo Red Bull, Christian Horner, ha reconocido que fue culpa de Kvyat. "Él estaba quizás un poco demasiado emocionado porque era la carrera de casa", ha asumido Horner en declaraciones para el diario Bild. "Pero es un piloto joven y aprenderá de ello", ha compartido.

La leyenda de la F1 y presidente no ejecutivo del equipo Mercedes, Niki Lauda, fue aún más crítico. "Si yo fuera Vettel, lo mataría. La FIA debe pensar en darle una advertencia", ha expresado el famoso austríaco para la Sky alemana.

Kvyat, sin embargo, solo recibió una penalización de diez segundos y le quitaron tres puntos a su superlicencia. "Creo que el castigo para Kvyat es suficiente", ha destacado Igor Ermilin, asesor presidencial de la Federación del Automóvil ruso para la agencia de noticias Tass. "Kvyat podría haber estado un poco más atento con la posición de Vettel, aunque era muy difícil para él por la severidad de la presión al correr en casa", ha señalado Ermilin.

"Para evitar que esto suceda (que pierda su asiento en Red Bull), va a necesitar avanzar a lo largo de la temporada y convencer al equipo para firmar un nuevo contrato con él", ha apuntado Nikolay Martsenko, un piloto y experto ruso, para Sportbox, un piloto y experto ruso. "O tendrá que convencer a otro buen equipo, lo que es posible pero no hay mucho tiempo. Espero que todo se resuelva bien para Daniil", ha finalizado.